Una de las cosas que más me ha sorprendido desde que estoy
inmersa en esto de la maternidad –además del aguante del cuerpo humano al
sufrimiento y a la falta de sueño reparador- es lo complicado que se vuelve
hacer cualquier cosa, por sencilla que parezca en un primer vistazo y es que
cuando una es madre y lleva recolgada a la prole, todo –y cuando digo todo
quiero decir todo- se vuelve tan complicado, que no sólo has de armarte de
valor antes de emprender cualquier tarea sino que, además, has de preparar un
plan con el que recomponerte después de llevarla a cabo, un plan que suele pasar por un
chute de ibuprofeno en vena y una buena dosis de voltarén por todo el cuerpo a
modo de body milk nutritivo.
Personalmente sufro de todas las cotidianidades reconvertidas
en hazañas porque la pelirroja es mucha pelirroja y no da tregua… así, es
imposible darse una ducha relajante –de esas de chorro de agua de 40 grados
sobre la cabeza- sin verla aparecer en el baño con sus pelos y su cara de loca
desquiciada, desnudándose con su agilidad de octogenaria y dejándose el vestido
a medio sacar de la cabeza trepando por la bañera –a veces con toda la cara
tapada por el vestido y las manoletinas de purpurina puestas-, dispuesta a
arruinarme la ducha, a elevarme los picos de estrés y a vaciarme dos botes de
mascarilla con extracto de seda natural en los pies…
Y así con todo.
Yo no soy mucho de cocinar, la verdad, que aquí quien cocina
–y bien- es el pater, pero de un tiempo a esta parte me ha dado por la
repostería y los cupcakes y todas esas cosas bonitas que siempre tengo
prohibido comer y que sólo hago para otros… Bueno, pues cada vez que me meto en
faena lo más discretamente posible, aparece la pelirroja con su mini rodillo de
la plastilina y su cara de churretes variados, dispuesta a ayudarme a hacer la
‘talta’. Y no es que yo no le diga que no, es que le da igual que la eche de la
cocina a empujones, que mi niña lleva estupendamente lo del rechazo y vuelve a
intentarlo con energía y ánimo renovado una y otra vez, una y otra vez... y a la quinta gana. Así
que al final me veo obligada a hacer dos tartas, una la de verdad –que por
supuesto no le permito tocar- y una segunda para que dé rienda suelta al
manoseo y a su peculiar sentido de la decoración con fondant. Y al final, como
la suya es un poco picassiana –por decir algo con clase- quiere meterle mano a
la mía y claro eso no puede ser, así que al final tenemos gresca y nuevos picos
de estrés.
Y así con todo.
Sin embargo, lo que llevo peor de las cotidianidades
engañosas son los paseos sin carrito –últimamente los únicos que tenemos- y
pasarme toda la tarde girando el cuello y maltratando mis maltrechas cervicales
para no perderla de vista. Y que no quiera andar y se detenga ante cualquier
cosa –y cuando digo cualquier cosa, digo una caca de perro- y que de pronto se
ponga a correr cual histérico atracador de bancos calle abajo y que se siente
en un escalón y decida hacer campamento base allí y que camine tres pasos por
detrás de mí como si yo fuera el emperador de Japón y que se ponga a gatear en
mitad de la calle, ocultándose entre la gente y que al final tenga que cogerla
en brazos y cargar con los 18 kilazos de pelirrojismo encima –más las bolsas y
bolso que lleve- para acortar lo máximo posible el infierno, aunque luego cuando
llegue a casa precise de una sobredosis de diclofenaco, además de los
ansiolíticos quiero decir…
Dios mio, igualita igualita que mi hija. Será el "gen de los dos años". Eso sí, lo de meterse en la bañera conmigo no lo ha intentado, gracias a dios. Si es que la pelirroja es mucha pelirroja, está claro. Hay que ver, que se quita la ropa y se quiere meter contigo en la bañera, jajajaja!! Madre mía, que graciosa. Tiene que ser muy divertido pasar una tarde con ella... Y si nos intercambiamos las niñas un día? Seguro que es más fácil de soportar, por lo general pensamos que los hijos de los demás son menos insoportables y que se portan mejor que los nuestros no?
ResponderEliminarUn amigo mio dice, que los hijos de los demás no molestan.. jaja
EliminarHecho!! Aunque mejor que una se quede con los dos un día y la otra respire mientras! jajaja
EliminarPues no es mala idea, además seguro que entre ellas se entretienen!! Ayyyyyyyy siiiiiiiiiiiii.......
EliminarComo siempre te digo, verdad verdadera!
ResponderEliminarLo de los paseos sin sillita es lo peor, mi gordita se sienta en todos los portales, se sube a todas (y todas son todas) las barandillas o similar que nos encontramos, y así podría seguir y seguir. Y lo que es peor, nunca quiere ir de la mano!
Yo me muero de la envidia cuando veo a niñas de su edad, tranquilitas de la mano de mami y con el lazo bien colocadito, ainsss!!!
Y lo de cocinar debe ser cosa de la edad, yo la acabo de comprar un delantal porque siempre me quería ayudar a lo que sea y me daba mucha penita decirla siempre que no! Aunque mis picos de estrés (como tú dices) suban cada vez que la veo con un cuchillo en la mano, o cuando tira el paquete de arroz por la cocina... cosas de la maternidad, supongo!
Pues nada, paciencia y mucho ibuprofeno, y hasta lexatín, no nos queda otra!
Besucos
Sorry, se me ha ido poner el nick, soy Evita.
EliminarEstás describiendo mi vidaaaaaa!!!
EliminarEl viernes por la tarde lleve a mi niña a una merienda infantil, mas para que vea a otro niños que para que vaya a disfrutar de los gusanitos que yo ya me declare ayer una rotwailer de la nutrición....
ResponderEliminarMi hija esta en la fase gateo a la velocidad de carl lewis, asi que me tuvo todo el cumpleaños con la lengua afuera....hoy es martes y el dolor de las agujetas va en aumento...
vida perraaaaaaa!!
Saludos
Jajajajajja y tan perra!!!
EliminarFloooor...leyendote pienso..Se animará alguna vez a darle un hermanito a la pelirroja??? ajajajaja...porque tu niña es mucha niña..no para!!!! no me extraña que estés agotada, porque yo tengo dos, cierto, pero son más buenos que el pan!
ResponderEliminarbesotes guapa
A veces lo pienso y luego pienso en el suicidio... jajajajja
EliminarYo esa fase ya la pasé, le llaman los "temibles dos años", aunque Julia fue a los dos y medio largos. Yo estuve a punto de tirarme por la ventana justo cuando iba a cumplir los tres y unos meses después, era un horror rabieta tras rabieta. Desde diciembre hasta comienzo de verano, más o menos.
ResponderEliminarAhora que ya tiene 3 y medio, está mucho más calmada. No del todo, pero se le nota mucho que las neuronas están asentándose, jajaja.
Así que Flor, aún te queda un poquito por pasar, espera a que la pelirroja cumpla los tres añitos y yo creo que verás en ella un cambio, aunque sea ligero.
Besicos.
PD: ¿Qué día nació la pelirroja? Sé que es en noviembre, pero a ver si compartimos día ambas dos.
El día 3! Así que ya mismo cumple los 3...
EliminarLo de los paseos es mortal, a veces tengo que salir corriendo detrás de ella con la panza de 8 meses y medio. Lo mejor es que ya ha entendido que la calle no la puede cruzar sóla por lo que suele pararse antes de inmolarse en la carretera. Y por supuesto ella siempre quiere ayudar y tengo que andar detrás recogiendo lo q va tirando por ahí.
ResponderEliminarUfffff... Yo embarazada no podría ni moverme del sofá!
EliminarJa ja como siempre, genial.. Pues yo sigo pensando que lo de mi hijo es preocupante, en casa no para, sube y baja escaleras como alma que lleva el diablo, corre por el jardín como si quisiera superar la marca de Usain Bolt, pero cuando digo de ir a la calle, engancha su carro y dice que está cansado, con tres años y medio que tiene, pero eso si, no se ata, y se tira del carro a la mínima que ve algo que le llama la atención, cualquier día se come la acera..
ResponderEliminarYo tuve un accidente de tráfico hace unos años bastante importante y mis cervicales están para el desguace, por lo que te entiendo, menos mal que yo solo cargo con 13 kilos..
Mandame a la pelirroja unos dias, a ver si entre el moreno y ella se desfogan agusto..
Un besazo
Me parece una idea genial! Te la mando con vueling!! Y sólo con billete de ida, jajajjaja
EliminarSiento en mis carnes tu estrés. Eres una narradora nata. Salve, Flor!!!
ResponderEliminarGracias, amore!!!
EliminarMi rubito la sillita la utilizó muy poquito enseguida se lanzó a andar y no quería ir sentado,con lo cual, nos vimos obligados a enseñarle educación vial antes de tiempo y la verdad es que puede ir sin dar la mano que no se aleja mucho de mí y si llega al final de la calle se frena en seco y espera,con lo que mi nivel de estrés cuando salimos no alcanza picos muy altos a no ser que se ponga cabezón y ahí ya no se puede con él.Un besito.
ResponderEliminarQué suerteeee
EliminarVamos, que de pensar en un posible hermanito... ni hablamos, no?
ResponderEliminarNo te creas que a veces lo pienso... pero poco, poco!! jajaj
EliminarQuiero Cupcakes, que los pruebas, no lo niegues!
ResponderEliminarNo sólo los pruebo, a veces los deboro en plan bulímica. Qué vida perra. Pero hago cosas más buenas que los cupcakes... Hummmmm
EliminarLos cake pops? no me digas! mater amantisima, dame unas clases!
EliminarPues imáginate todo lo que cuentas con una rubia loca (mi princesita) y un niño mofletudo (mi Repollete) detrás de ti, uno imitando a la otra en todo lo que hace, pero siendo menos ágil asique los resultados suelen ser bastante dramáticos.
ResponderEliminarJajajja, pobre!!
EliminarDesde que nació mi hijo hace 9 meses, me ha dado por cocinar...y antes ni me acercaba a un caldero!!! ahora me paso el día buscando recetas (faciles, que me gusta la cocina pero no se me da).....soy como Bree Van de Kamp la de "Mujeres Desesperadas"....
ResponderEliminarAhora entiendo porque dicen que la maternidad te cambia...a mi me tiene del revés...
Buen día!!
Así estoy yooo!!!!!!!
EliminarAyyy este post me ha llegado!! Lo primero: los "terrible two" son lo peorrrrr!!Mi hija mediana,de 2 años y medio esta para regalarla,cuando le dices q no a cualquier cosa,y no con tono de enfadada,sino con tono suave y dulce,el caso, q escucha la palabra no y se tira al suelo como orando a la Meca,20segundo sin respiración xq esta cogiendo aire para el súper llanto y acto seguido suelta un chillido/llanto capaz de romper hasta los cristales blindados!y nada,q no hay manera de razonar con ella,ya la estoy empezando a castigar xq me da miedo q se convierta en una consentida..yo q se!dicen q los medianos son mas problemáticos??xq su hermana mayor de 4 años es un gustazo,se puede razonar con ella,comprende,obedece..en fin!!a ver como evoluciona!!
ResponderEliminarTambién me siento identificada con tu repentIno interés x la repostería!a mi m ha pasado lo mismo!m regalaron la thermomix y mi casa es un no parar de bizcochos,magdalenas y tartas!!!y lo peor de todo es a yo si a no lo puedo comer xq soy diabética!!(me apareció en la curva del azúcar de mi primer embarazo y ya se m ha quedao pa siempre,con insulina y todo!pa q luego digan a el embarazo es un estado de felicidad y plenitud para la mujer...y una mierdaaaaa!hasta una enfermedad de x vida ma dejao!) cosas de la vida!!!
Un besitoooooo
Alex. (la nueva ;-)))))
Piensa en la parte positiva, así mantienes la línea!!! La maternidad na más que nos da disgustos, jajajja
EliminarPues yo ya sabes que también soy de hacer postrecitos y a las nenas les gusta ayudar...Vamos a hacer panqueques(hablamos así)Vamos a hacer panqueques y te cascan los huevos que va media cáscara detras; para sacarla meten la mano toda. Que ahí te das cuenta que les tenías que haber cortado las uńas... Se pelean por quién echa la harina y al final la echan, pero al suelo, con lo antideslizante que es...Agarran el bote de Nutella y le meten el cuchillo bien dentro como lo quisieran asesinar que luego pringan todo.
ResponderEliminarY por último viene la chiquitina y te agarrra un chicken de la nevera(un huevo, bah, es que es bilingüe y muy adelantada) y te lo estampa en el suelo que acababas de fregar.
Esta receta aún no la he puesto en mi blog pero atiendo peticieones del público XD
Jajjajaja, y te sale algo decente??? Qué estrés, así no puede una hacer ná!
EliminarLo de la cocina es un clásico. Mi abuela me hizo un delantalito rosa porque antes no los había pequeños. Mi madre se ponía a cocinar y yo me ponía al lado a mirar, intentaba ayudar pero como no podía, solo le pasaba los ingredientes y rebañaba, eso me encanta! Nos presentamos hace un par de años a un concurso de cocina y yo quede primera y ella segunda XD ahora cuando estoy en casa y ella trabaja se alegra de que sepa cocinar, tiene la comida lista cuando sale.
ResponderEliminarQué maravillaaa!!! El pater cocina de vicio y yo no sé freír un huevo!! Bueno, no sabía que ahora soy casi experta!! jaja
Eliminartu blog y el de la madre tigre mis dos paracetamoles diarios.
ResponderEliminarGracias
Qué piropazoo!!!! Gracias!!!
EliminarPues nada Flor, yo te recomiendo que te compres la thermomix que para estos menesteres es una maravilla y a mi hijo le vuelve loco. Hay una para niños!! pero me parece que vale 50 euracos y los tengo destinados a una camiseta.
ResponderEliminarJajjajajaj, eso, eso!! Yo como ya mismo es mi cumples, espero recibir suculentos regalitos!! jajja
EliminarLeer tus cotidianidades me a estresado, x q las vivo en mis carnes y me han venido de golpe a la mente, en este mi momento relax.
ResponderEliminarTu idea de darle su ptopia tarta m ha gustado, te la copio. Yo siempre acabo gritandoles: ni se te ocurra tocarrrrlaaaaa!!!
Una delicia leerte siempre.
Besos apretaos.
Bueno, yo también acabo diciendo eso... jajajja
EliminarBARBARA: Qué cosa más rara... Te he leído en el móvil diciendo que se te borraban los comentarios, pero yo podía leerlos todos y ahora, abro el blog y no están!!! Qué paranormal es todo, no?? A mí a veces me pasa que parecen que no se han publicado, pero refresco y salen...
ResponderEliminarEl momento paseo sin carro es lo peor de lo peor. Mi pq se para también ante cualquier cosa, y quiere subir cada escalón que encuentra ¡qué estrés, madre mía!
ResponderEliminarAaaaaains, tu pelirroja haría muy buenas migas con mi rubia, cumple tres años el 14 d octubre y adora ponerme a prueba, hoy le he gritado un par d veces "venga Adriana, q nos están esperando" a lo q ha contestado con su voz de renacuajo "pues q esperen"... Ojiatica me he quedado!
ResponderEliminarMadre mía veo que tienes una terremotillo en potencia! Aunque veo lo que me espera, Medusi tb es un bichejo y ahora ya con 18 meses no quiere ir en el carro y si le llevamos suelto no nos quiere agarrar de la mano, así que cuando llegue a los dos años no se que vamos a hacer!
ResponderEliminarPaciencia y ya nos iras contando tus trucos para cuando vayamos llegando las siguientes :)