Y es que el embarazo es un goteo de malestares continuos,
aderezados por pequeñas alegrías para que la gente pique y se preñe y que te da
el malestar de poco en poco para que no acabes de confiarte ni mueras de
malvivir, así en los primeros meses tienes las vomitonas infernales pero no tienes
barrigón inflexible en plan caparazón de tortuga, y cuando tienes el barrigón
ya no tienes náuseas pero si ardores y así vas esquivando como puedes un todo
incluido de molestias y que conste que cuando digo molestias estoy siendo la
mar de generosa.
Bueno, pues si el embarazo ya es un tormento en sí mismo,
cuando se trata del segundo y ya hay una criatura danzando por la casa y
reclamando tus atenciones la cosa se complica hasta límites insospechados. Y es
que cuando la primera vez te levantabas con un aluvión de vómitos en cadena en
plan ‘Este niño es un demonio’ siempre podías hacerte la muerta en la cama o
tirarte a dejarte morir en el sofá y así entre telebasura y revistas y cuerpo
en ovillo, el malestar era menos malestar. Un poco al menos.
El problema es que cuando ya no eres tú y tu cuerpo serrano
sino que hay otro ser vivo fuera de tu útero que clama por tu atención, no es
que ya no haya posibilidad de tirarte a la bartola sino que ni siquiera la hay
de encajar la cabeza en el WC sine die, sin que la nena se arrodille a tu lado
buscando lo que presuntamente has perdido y gritándote a la oreja ‘¿Qué paza,
mamá, qué paza? ¿Qué hay ahí?’ bordeando la barrera del sonido. Y no te queda
otra que fingir que estás bien para que no trate de cuidarte, porque aunque muy
tiernos, esos cuidados son físicamente muy dolorosos, que aún recuerdo cuando la
pelirroja me quiso echar cremita en la cara por un eczema que me había salido
junto a la nariz y acabé con las pupilas inyectadas en crema Nívea.
Y claro en el primer embarazo prohibías al pobre pater usar
colonia o cocinar según que comidas que podían matarte con sólo mirarlas y más
o menos ibas tirando, cruzando de acera si veías una freiduría o cambiando de
canal si salía un anuncio de Telepizza…
pero bien… pero ahora, ahora qué hace una con ese peste a aceite rancio
de las plastilinas o el olor que te palpita directamente en el hipotálamo a
gusanitos naranjas que lleva la nena espachurrados entre los dedos o los zumos
ésos que tienen leche y que huelen como a matojos. Pues vomitar. Una y otra
vez. Como si no hubiera un mañana. Mientras la nena te sujeta el pelo y te
hinca los codos en la espalda, lesionándote un par de vértebras.
Lo peor es que el tema de las náuseas en el segundo embarazo
es sólo el principio. Hay más. Mucho más. Pero ése será otro capítulo.
ayy pobre... tengo una amiga que está igual pero con DOS fuera de su utero ... me considero taaaaaaaan afortunada... besos y animo!
ResponderEliminarQué suerte!! Bueno, ya al menos no hay náuseas que es lo PEOR!!! jajajja
EliminarSi lo sé, es tremendo. Yo la verdad estoy teniendo mucha suerte y el pater me tiene en palmitas. Según llega a casa prácticamente se hace con todo, la cocina, la niña, las lavadoras y yo me dejo morir en cualquier lado. Lo de dormir mucho también funciona bastante bien, yo duermo y duermo y duermo (para tener que vivir en el infierno mejor dormida) y la verdad es que se lleva mejor descansada... Aún así el cansancio crónico es monumental, me despierto bastante descansada y al mediodía ya me quiero tirar de nuevo a dormir, con la mala suerte de que estoy en el curro y es imposible claro.
ResponderEliminarQue perra vida la de la mujer embarazada, y sobre todo si es madre embarazada...... Y la que diga lo contrario, miente!!!
sí!!! Mienteeeeeee!!! jJajajjaja
EliminarPobreta... supongo que como dices al tener a la peque aún es muchísimo peor... gracias a tus post cada día tengo más claro que tendré hijo único. Aunque debo ser masoca porque después de todo lo que leo sigo queriendo tener un positivo jajjaa
ResponderEliminarClaro que sí!!! Que aunque yo no lo cuente, tiene una parte positiva y se me cae la baba cuando la pelirroja me pide que le cuente cómo vamos a cuidar del hermanito 'yo lo tengo que cuidarz porque yo zeré la helmana mayorz, a que zí?' Ainss... Busca tu positivo y súmate al malvivir!! jajajjaja
EliminarAy pobre! No me quiero ni imaginar abrazada al Sr. Roca y con mi gordita merodeando!
ResponderEliminarEres una campeona!
Me quedo con una única hija la mar de bien ;-)
Un besuco y mucho ánimo!!!
Jajajjaja
EliminarAy Flor, te comprendo tanto... para mi el embarazo es una enfermedad, nunca me he sentido tan mala... vomitos, mareos, nauseas, ardores, dolores musculares, sialorrea, bajadas d tension, miembros hinchados, pies de hobbit... y he tendio el segundo hace unos meses!!! animo q vale la pena!!! t lo dice una compañera de infortunios, q menos el lumbago ha tenido de todo.
ResponderEliminarDe hecho , creo q en futuro, muy muy muy futuro, cuando se m olvide un poco lo mal q lo pase, picare y tendre otro... q soy asi d tonta y cuando abrazo a los gorditos se m cae la baba!
Y tanto!!
EliminarEn mi segundo embarazo mi nariz rechazaba todos los olores del mundo excepto -curiosidades de la naturaleza- el olor de los pestilentes pañales de mi hija mayor, que por entonces tenía dieciocho meses, ¡Es que hasta la olor de la niña me daba nauseas! Y no digamos cuando comia gusanitos......
ResponderEliminarLos gusanitos los carga el diablo!!
EliminarPobrecica mía... Nunca he estado embarazada así que no sé lo que se siente pero siempre me ha olido sospechosamente a mito esa imagen bucólica de la mujer acariciándose la barriga mientras mira con una sonrisilla a través de un cristal empañado por la lluvia. Besotes!!!
ResponderEliminarMarketing puro!! jajaja
EliminarUfff...yo vomitos no he tenido. Alguna q otra nausea al principio pero nada mas!. Eso si, el.olor a fritanga...no lo aguanto. Y mi marido ha tenido q dejar de usar el gel q usaba siempre...aaarrrggggg!!!!.
ResponderEliminarArdores???? Llevo una semana q despues de cenar son horribles!!!.
Y un dolor en las caderas y en las ingles (sobretodo cuando trabajo y estoy unas 7 horas de pie!) q no puedo ni andar!!!!. Embarazada de mi bichillo estaba yo mucho mas agil! (como q iba yo sola a monitores conduciendo y todo!). Como siga asi, al final del embarazo me van a tener q llevar en silla d ruedas, jejeje. Y culpa de esto lo tiene mi bichillo...q m tengo q tirar al.suelo a jugar con el!.
Bueno, piensa q nos quedan tres meses nada mas! Jejeje.
Es verdad, ya queda poco!!
EliminarVenga Flor que juntas podemos con esto y más,yo estuve muy mal al principio en cuanto que paso el tercer mes mejoré y ahora de cinco, estoy en la gloria, pero no voy a confiarme, que los últimos meses tampoco suelen ser muy agradables,menos mal que tenemos luego una recompensa que merece la pena pasar por todo esto.Un besito.
ResponderEliminarYo ahora ya estoy muuucho mejor! Aunque peor que en el primer embarazo!!
EliminarFlor, tienes que ponerle ya un pestillo a ese cuarto de baño!
ResponderEliminarYa lo tengo!!! Pero temo que me rompa la puerta y a veces lo dejo abierto! jajaja
Eliminarmucho ánimo Flor que esto es solo el principio :)
ResponderEliminarpues sí, con una nena pululando por casa es imposible descansar pero lo mejor es tomárselo con filosofía porque es lo que hay. Pero bueno, paciencia y piensa que cada día que pasa queda menos.
Eso, eso...
EliminarAinsss pobre Flor! Menos mal que ya estas mejor con los vomitos, me parto con la pelirroja preguntando que has perdido en el vater.....(si, ya lo se que tu en ese momento no estabas para risas).
ResponderEliminarPero luego me reía... no me queda otra!!
EliminarAaayyy,que tiene que ser un suplicio lo de los vómitos,menos mal que la pelirroja está a tu lado en estos momentos,que así algo para los post sacas jajaj,yo no he sufrido estas cosas en los embarazos,pero que el segundo pasa de otra manera que el primero es cierto,y eso que mi primer embarazo lo pasé trabajando fuera de casa hasta el último día,el segundo lo pasé trabajando en casa,con un niño pequeño y sin horario,que no tener horario y no poder largarse es un coñazo.La de los churumbeles.
ResponderEliminarAsí estoy yo!!!
EliminarEs que las náuseas y los vómitos son lo peoooor...ánimo guapa que tú puedes!!!besotes
ResponderEliminarAins, ya queda menos!!
EliminarRecuerdo que mi madre y las señoras mayores llamaban al parto "aliviarse" y yo ingenuamente como vil no madre decía "pero si no estaba enferma"... ya me dí cuenta que sí, de verdad una se "alivia" del embarazo.
ResponderEliminarAnimo Flor, te mando un abrazo. Yo sigo pensando que me quedaré sólo con una nena pero quien sabe, ya está visto que las neuronas no dan de sí y a las madres nos da por repetir quien sabe porque, misterios de la naturaleza.
Estamos locas!
EliminarY no por desanimarte, porque ya lo sabes, pero y lo que te queda... jajaja. Y lo q nos reiremos los demás a tu costa :-)
ResponderEliminarM alegra q vaya bien ;-)
Me queda la traca final!! AY! jajjajajaj
EliminarDicen que el segundo embarazo es terrible, así que hazte con todas las fuerzas y buen rollo del mundo. A veces la gente se equivoca, por si te sirve de consuelo.
ResponderEliminarOjalá, pero me temo que en esto no! jajaja
EliminarPues lo peor no es el segundo embarazo... Es convivir luego con un bebé que tarda una hora en comer mientras, justo en ese tiempo, al mayor se le presentan los mayores contratiempos: quiere ir al baño, llora desconsolado tirado en el suelo porque se acaba de despeñar del sofá, le entra hambre como si llevara 5 días en una cueva sin víveres... ¿A que ya no es tan malo el segundo embarazo?
ResponderEliminarTe sigo desde hace tiempo, eres la mejor. Y muchísimas felicidades por el pelirrojito. Que ya en serio, compensa mucho tener a 2 peques por la casa, es lo mejor que he hecho en la vida. Aunque eso sí, no repito ni por todo el oro del mundo. 3 ya son multitud. Besos.
Jajaja lo que me he podido reir, es lo mismo que me ha pasado a mí. Mis dos embarazos han sido dos pesadillas y en el segundo aún peor con mi pobre nena de dos años todo el día ¿mamá vas a gomitar? y siguiéndome al baño...Para mí desde luego todo empezó a ir mejor cuando la segunda estaba fuera de mi pobre cuerpo.Después de esto me corto la coleta. Mucho ánimo!!!
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