1.- Cuando tu hija empiece a lamer espejos en tu tienda
habitual o estire el vestido de licra de nueva temporada de la percha como si
fuera un chicle, haciéndole saltar un par de lentejuelas, o trate de sacarle un
brazo al maniquí, huye. Sin mirar atrás. Y si alguien te mira pidiendo
explicaciones di que no la conoces de nada. A tu hija luego le puedes explicar
que era un juego para que no le queden secuelas, pero no te ablandes hasta la
salida o hasta que las dependientas estén en modo corrillo.
2.- Cuando el niño llore, dale lo que quiera. Aunque sea el
semanario de oro que te regaló tu abuela o un poco de uranio enriquecido que
guardas en la mesilla de noche. Lo importante es que se calle y que no te
taladre el cerebro porque si el llanto acaba por perforarte el hipotálamo ya no
habrá marcha atrás y serás una madre verbalmente violenta de las que da mucha
vergüenza de ver en acción fuera de un espectáculo de Los Morancos.
3.- Llena la nevera de Red Bull y el cajón de las medicinas
de lexatines y altérnalos según requiera la ocasión. Que has pasado una mala
noche y tienes que irte a trabajar con los ojitos güertos, híncate dos red
bulles. Si luego por la noche no te puedes quedar dormida porque tienes los
ojos como platos de la sobredosis de cafeína y taurina, tómate un lexatin... o
dos. Lo más probable es que te dé un ictus, pero todo en esta vida no se puede
tener. Hombre ya.
4.- Aprovecha para descansar o darte al ocio a la mínima
ocasión que puedas. Eso de ‘voy a dar un spring y arreglo toda la casa a tope
ahora que los niños no están’ no vale para nada. Los niños llegan y todo vuelve
a ser un caos y encima estás de mala uva porque no has descansado un minuto. Finge
que eres una neohippie que tiene que meditar o que la única limpieza y el único
orden que importan son los interiores y date al tumbing lo que puedas.
5.- Cómprate más ropa que la que les compras a ellos porque
tú no tienes previsto crecer más –a no ser que te abones a los Bollycaos- y las prendas te duran más de una temporada, así que en realidad es una inversión. Además, ellos pueden vestir como
refugiados si total van a tirarse al barro, pero tú eres una buena moza que
tiene que lucir bella. Y una madre bella es una madre feliz y las madres
felices gritan menos. O al menos gritan más bajo. O sea, que en realidad lo haces por ellos...
Jajaja buenísimo el post...llevo tiempo sin comentar porque desde que empecé el malvivir de la maternidad en febrero, no doy abasto!!! Cómo me ha cambiado la película!!! Ay!! Me apunto estos 5 consejos...me parecen muy útiles!!!
ResponderEliminarJajaja buenísimo el post...llevo tiempo sin comentar porque desde que empecé el malvivir de la maternidad en febrero, no doy abasto!!! Cómo me ha cambiado la película!!! Ay!! Me apunto estos 5 consejos...me parecen muy útiles!!!
ResponderEliminarJajajaaaa me ha gustado sobre todo el numero 5! Lo malo es q con este tamaño entre una foca y una vaca q tengo ahora,salgo de los probadores de las tiendas llorando y con una depresion de mil demonios. Porque si le sumo a los mil kilos q he cogido en esta primera mitad de embarazo el blanco nuclear post invernal y la mala cara q me acompaña ultimos meses....casi mejor ni entro en las tiendas.
ResponderEliminarYo hago tumbing cada vez que puedo y a la mierda la plancha y lo que se ponga por delante jaja , una madre bella y descansada es una madre con menos mala leche y pinta de estar aún cuerda , y menos propensa a dar voces en plan estate-quieto y sé-bueno-que si no-me-da-el ataque jiji qué gran verdaaaaad
ResponderEliminarTe sigo desde siempre pero es la primera vez que comento. Con dos terremotos de dos años, el punto cuatro ya lo llevaba a cabo desde hace tiempo, pero los demás me los grabo a fuego, sobre todo el cinco. Qué grande eres Flor
ResponderEliminarJajajjaja pero que bien lo explicas, eres un libro abierto y no te cortas un pelo, me gusta jajajjajjja.El 1 algunas veces lo hice, el 2 casi siempre, con el 4 empecé hace tiempo y el 5, el 5 es mi oración de buenos días!!!!! para el 3 soy una cagada. Hoy me llevo premio a mala madre seguro, viva!!!!! La de los churumbeles. Buen fin de semana.
ResponderEliminarLarga vida al tumbing y muerte al planching, dí que yess.
ResponderEliminarTe habla una ferviente admiradora del punto nº 4.
ResponderEliminarEso sí que es sabiduría, y lo demás son tonterías.
BEsicos.
Jajajaja. Lo del Red Bull y los lexatines lo voy a tener que aplicar. No tengo miedo al ictus. Besotes!!!
ResponderEliminarHace tiempo que los aplico todos, el 3 solo vario el Red Bull por cafe.. Bueno y el 1 no, porque simplemente no voy a tiendas, compro por Internet cuando se duermen..
ResponderEliminarAh y tambien cambie el clasico "el que tiende bien plancha la mitad" por "el que tiende bien no plancha nada"
Eso de que una madre bella es una madre feliz y grita menos o mas bajo es cuestionable, aunque es una verdad como un templo
ResponderEliminarBuenísimo! Debería imprimirme el punto número 4 y colgarlo en la nevera jajajjaja Y el 5 pegarlo en mi armario! Y el 2! El 2 por toda la casa. El 1... ejem, en serio lamerá espejos? y el maniquí.. y.. ay! el 1 me da mucho miedo.
ResponderEliminarSaludos!
Hola! Me encantan los articulos!
ResponderEliminarAqui teneis un buen sitio donde encontrar regalos para nacimientos:
http://www.fanikis.com/index.php?pantalla=catalogo&id_tipo=501&titulo=Regalos%20Nacimientos
El punto dos, cuatro y cinco, los cumplo al pie de la letra... que si la nena quiere cuchillos pa'jugar : vamos, que le puede pasar? Y ni hablar de comprarle zapatos o ropa cara, ¿para que le duren tres meses? nada, a mí me dura mínimo tres temporadas...
ResponderEliminarUn abrazo!!! Te superas cada día Flor!!
JA ja ja, desde luego qué verdades XD me parece a mi que voy a dejar de recoserme la ropa y salir a comprarme un par de modelitos...
ResponderEliminarY... seguramente me de al tumbing, hombre ya!
El punto 4 y 5...a partir d ahora a llevarlo a rajatabla! Jajaja.
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