La genética no sólo es caprichosa, como diría la que fuera
mi profesora de Biología, sino que es acojonante –esto ya no lo diría ella, que
era una señora que llevaba perlas y el pelo cardado por lo menos a cuatro o
cinco centímetros del casco-… si no que se lo digan a la pelirroja que
teniendo dos padres morenos tirando a gitanos, va y hereda los pelos
anaranjados de mi tía, o sea de su tía abuela y
se ve condenada a una vida de protección solar 50 y blanco nuclear sin comerlo ni
beberlo.
Pero cuando digo acojonante no lo digo sólo por eso -que a
ver, que también tiene miga el asunto que no digo yo que no-, sino porque ahora
que la niña va haciéndose mayor va desvelando pequeñas herencias de unos y de
otros, en su forma de hablar, en cómo mueve las manos cuando se ‘enfarruca’ o
en cómo pone los ojos en blanco cuando se desespera mientras trata de
explicarme por qué Swipper es un zorro ‘ezcurridito’ y nota que mentalmente
estoy repasando la tabla del seis.
Pero ahí no queda la cosa, porque además de eso y de sus
filias y fobias respecto a según qué cosas como su amor incondicional al igual
que su padre por la miel –¿habráse visto brebaje más asqueroso? que para quien
no lo sepa, es vómito de abeja-, ha heredado también rarezas familiares como la
capacidad de delirar y/o entrar en estado de misticismo cuando el sueño la
invade toda. Y dado que la niña no quiere dejarse conquistar por él y trata de
evitar dormirse, nos regala auténticos momentazos de delirium tremens, que
ríete tú de Ortega Cano.
La primera vez que pasó fue hace algunas semanas cuando estábamos
en el sofá viendo algún dibujo infernal para que acabara cayendo en coma y
poder trasladarla a su cuarto con nocturnidad y alevosía, cuando empezó a reírse
como una loca y a gritar: ‘que el agua eztá mu fría, agüeloooo, y no me puedo
bañal, qué eztáz loco’ y más se reía… y yo, con lo ojos desencajados sin tener
muy claro de qué iba el asunto, mirando a un lado y a otro a ver si mi padre se
había colado en mi casa con un barreño de agua helada a las tantas jigonas y lo
tenía agachado tras el sofá, -que yo sé que mi padre tiene jodido el menisco,
pero cosas más raras se han visto- pero viendo que no y que la niña ya se había
callado, decidí dejar el asunto por zanjado y fingir que aquello no había
pasado cuando la niña –que parecía perfectamente despierta- volvió a gritar 'tú
zí, agüelo, bañate tú' y ya con el corazón en la boca, tuve que llamar a casa
de mis padres, no fuera a ser que a mi padre le hubiera fulminado un rayo,
pobretico, y hubiera venido a despedirse de la nieta y de sus nuevos y
aterradores poderes extrasensoriales. Pero tras una conversación surrealista
con mi madre –que como también es una loca como yo, creyó que donde había pasado
algo era en mi casa por aquello de llamar tan de noche- atestiguamos que todos
estábamos vivos, majaras, pero vivos.
Y así quedó el asunto hasta que otra noche la niña ya en la
cama casi a punto de dormirse empezó a decirle al pater ‘¿por dónde ze ha ido,
por dónde ze ha ido? ¿tú lo haz vizto?’ Y yo que aguardaba en la
puerta, casi me dejo el ojo en el quicio por entrar como las locas y acoplarme
allí con el pater y la loca, no fuera que la niña estuviera viendo fantasmas y
me dejaran allí sola para que acabaran poseyéndome o algo peor. Y yo le dije ‘Pero
qué hay que ver?’ rezando para que no dijera ‘A Satanás' y me escupiera vómito
verde a la cara y la niña con los ojos como platos me dijo: ‘el polvo de hada, mamá, que tengo
que llevarlo mañana al cole, que me lo ha dicho la zeño’.
Y una vez que terminamos la pantomima y antes de poder
mostrarle mis preocupaciones al pater, me acordé de aquella vez cuando casi al
principio de salir juntos, en la cola de un bar a las tantas de la madrugada –cuando
el pater aún fingía que le interesaba el mundo de la noche- inició aquella ya mítica
conversación:
¿Qué hora es? / Las cinco y cuarto/ Pues vámonos que vamos a
perder el avión
Y yo, que de pronto pensé que aquello era un viaje sorpresa
que me había preparado para irnos juntos a algún lugar muy romántico y
fabuloso, le dije para hacerme la despistada…
¿El avión? ¿Qué avión? / ¿Qué avión? / No sé, lo has dicho tú
/ ¿yo?, ¿el qué?/ ‘¿Cómo que el qué? algo de un avión… / ¿Un avión? qué disparate...
Y seguimos haciendo cola como si nada. Y a punto estuve de
salir huyendo de allí ante la idea de estar saliendo con un loco perturbado, pero
me quedé a darle una oportunidad a su cordura… y al bar que decían que estaba
muy bien. Y me alegro. Eso sí, ahora en lugar de un loco en casa tengo a dos. Y
sólo espero que cigoto sólo delire borracho, como todo hijo de vecino, que tres
ya serían multitud.
Madre mía!! Pero parece que están despiertos, no? Mi marido hace eso, que se pone a hablar, pero lo hace (y sólo a veces) cuando ha caído en brazos de Morfeo. Vale que tarda en dormirse un segundo. En serio. El tiempo de darme la vuelta y ya está sobado. Y es entonces cuando empieza a hablar y podría pensar que está despierto. Pero no, está dormido y con los ojos cerrados. Esto de que lo hagan con los ojos abiertos, sí que da miedito, porque parece que les haya dado algo...A mi sólo me ha pasado algo así, cuando me dio una insolación en la playa y al día siguiente, con fiebre, estaba acostada y delirando, según me han contado, pidiendo que mi tío me trajera un libro verde...¿?....Vete tú a saber porqué....Jajajja. Mi tío trabaja en la Junta....lo mismo de ahí el color verde...Jajajaja.
ResponderEliminarLo bueno es que sólo les pasa cuando están al límite, ¿no?. Desde luego, mola que tu hija te diga que tiene que buscar el polvo de hada para llevarlo mañana al cole, jaja.
Besos.
Jajjajajjajaj... Menos mal que no te dio por criticar a nadie!! Sí, sólo les ocurre esporádicamente y cuando están muy muy cansados y a punto de dormirse! Pero lo hacen con los ojos abiertos y mirándote como si estuvieras despiertos! jajjaja
EliminarCoincido contigo en que la miel es un brebaje asqueroso, mi madre, que es muy fan, lleva toda la vida persiguiéndome para que la tome, achacando cualquier problema de salud que pueda tener al hecho de no tomar miel, "que mucho mejor te iría si me hicieras caso, Eva María".
ResponderEliminarY por otro lado, mi niña habla por las noches, se carcajea, grita y monta cualquier jolgorio. El nene de más pequeño se levantaba dormido y te lo encontrabas por cualquier lado...Una juerga.
Qué bien os lo pasáis!!! jajaja
EliminarJajaja, qué poco os aburrís en casa!!!
ResponderEliminarMi contrario es sonámbulo, pero de los que se levantan y andan por la casa. Podría contar mil anécdotas. De momento los enanos duermen a pierna suelta, espero que no lo hereden...
Muchos besos!!!
Qué susto!! Y habla?
EliminarSí, y habla!!! Con todos los extras, jaja.
EliminarHola Flor, soy Raquel y llevo unos días leyendote por recomendación de una amiga, quiero felicitarte por tu blog porque eres una genia de la palabra de verdad. Yo aún no soy mamá pero espero serlo pronto ya que me voy a someter a una IA, voy a hacerlo en solitario y la verdad es que sé que será un proceso a veces duro aunque me merece la pena, por eso estos ratitos leyéndote me encantan y me hacen reir una barbaridad.
ResponderEliminarGracias y enhorabuena de nuevo
Vaya!! Enhorabuenaaa!!! No dejes de contarnos cómo va la cosa, aunque seguro que te irá genial!
EliminarBesos y muchas gracias por los piropos!!
y mantennos informadas que aquí somos muy cotillas!!! jajaja
XXX
Bueno entonces estoy en el sitio indicado porque yo tb soy un poco cotillina jejejeje. Ya os iré contando mi odisea.
EliminarBesitos
jajajjajajajjajajjajajaj... ay, que no me he podido reír más!!! Me he imaginado las escenas y estoy llorando de la risa!! Y eso que a mí me acojonan esas cosas cuando se trata de niños. Mi marido, que casualmente es malagueño, también hace eso de hablar por las noches (puedo mantener con el conversaciones alucinantes y luego no recuerda nada), ir andando por la casa dormido y cosas raras de ese estilo. Yo ya no me inmuto y sigo durmiendo tranquilamente, pero si fuera un niño/a... uff... he visto tantas pelis de miedo con ese argumento que estoy muy sugestionada, jajjajajjajaja.
ResponderEliminarMare meua, no ganas para sustos! Que paséis un buen fin de semana!!! Muchos besazos!!!
Al principio me daba pavor pero ahora me lo paso en grande escuchando las conversaciones surrealistas, aunque sólo pasa muy de vez en cuando... Ahora, dormida, también tiene sus conversaciones, generalmente discusiones con amiguitos del cole, primos, un no parar!!
EliminarANA
ResponderEliminarAY MADRE QUE PELIRROJA ESTA CON RAZON SU TITO ANTONIO ESTA LOCA POR ELLA.
BESITOS DE LOS DOS.
Hola, Ana!! Qué tal todo?? Me alegra leerte por aquí! Y sí... la pelirroja es mucha pelirroja!!! jajja
EliminarPor favor que bueno!! En mi caso el pater es el que habla y afemas hasta le puedea dar conversacion surrealista y meyerle mensajes subliminarrs jojoki
ResponderEliminarpues Peque no sé de quién lo habrá heredado pero también entra en trance. Tendría unos cuatro años, cuando una noche, la niña estaba, se supone dormida ya, entró Padre a la habitación a apagarles la luz Pre estaba aún despierta y de pronto se sienta en la cama, los ojos como platos y le dice "papi quítame la chancla que me hace daño", Padre le mira los pies y lógicamente no lleva chancla de ningún tipo, así que muy serio le toca el pie como si se la quitase, la tapa, la acuesta y le da las buenas noches, Peque con una sonrisa le dice "gracias Papi, menos mal que viniste a quitarmela". Acoj... ese fue el primer episodio, hemos tenido más y seguimos....
ResponderEliminarBesinos
Lo que pasa es que la pelirroja tiene mucho mundo interior y una imaginación y locuacidad de envidiar!!! Es listísima y superespabilada. Va para letras como su madre.
ResponderEliminarBesos a las dos!
Yo tuve un novio que dormía con los ojos semiabiertos y a veces hablaba en sueños con lo cual me llevé más de un susto (y muchas risas para que mentiros) porque se ponía a hablar dormido con los ojos semi abiertos y no sabía nunca si dormía o no....
ResponderEliminarPero con la pelirroja.. que miedito no???
Jajaja. Pues me ha recordado al churri... Cuando tiene sueño es capaz de decir las incoherencias más grandes. No las reproduzco por vergüenza ajena. Besotes!!!
ResponderEliminarJajajaj,pero como te superas,esto es un no parar,imposible relajarse....,en mi caso tengo que oír a altas horas al churumbel mayor,penita me da,pero imposible aguantar la risa de las burradas que suelta,que mala soy,tiene noches,menos mal porque se monta cada charla....,por lo demás los dos son bastante parecidos a mí,la que me espera....PD-nos encanta la miel.La de los churumbeles.
ResponderEliminarJajajajajaja, es normal, no has oido la nana esa de "mi niña se duerme con los ojitos abiertos como las liebres"??? pues te lo ha copiao morena jajajaja. Suerte..
ResponderEliminarBesos.
En mi casa el que hace eso es el pequeño. Mi tío Antonio era hasta sonámbulo, que mi abuela le tenía que encerrar en su habitación y ponerle trampas porque se levantaba y salia a la calle. Y mi abuelo el pobre, que se acostaba y decía que estaba repartiendo bombonas con el camión, hasta se ponia con los brazos como cogiendo el volante y con los pies como conduciendo y diciendo que no le distrajeses que tenía que llevarle una bombona a Anita Rubio XDXD yo me meaba de risa, y con mi hermano igual, se pone en medio de la habitacionn charlando y cuando le digo que se calle me dice "dejame, que tú tienes la serpiente". Ala, venga si, todos locos. Aunque yo una vez me dijo mi novio que me levanté y me puse a hablar en arameo, y cuando mi novio me dijo algo le dije que iba a freir huevos fritos XD Aqui cada loco con su tema.
ResponderEliminarBuf, esto de la genética es rarísimo y desigual. En mi casa hay tendencia a ser rubios y ojos claros y yo he salido morenaza de pelo, ojos marrones comunes y una piel terriblemente blanca (porque mira, si hubieran venido el pack morena total, pues no me importaría, pero lo del blanco nuclear...).
ResponderEliminar¡Qué entretenida estás siempre! La pelirroja tiene que ser para verla. Un besín desde más arriba. Mónica
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