Vale que desde que soy madre, vivo estresada y vale que
desde que vivo estresada, tengo los nervios desquiciados y vale que desde que
tengo los nervios desquiciados ya no soy tan simpática como antes, vale que
huyo de las dependientas torpedo que quieren ayudarme, que esquivo a los
adolescentes incombustibles de las ong y que a veces hasta me permito el lujo
de decirle a las teleoperadoras -a las que habría que darles una patada virtual
para que entendieran que me la repanpinfla la cantidad de sms que piensan
regalarme- que no me llamen más si no quieren que acabe ingresada en una
clínica mental, pero a pesar de todo sigo siendo una persona amable que trata
de sonreír –o hacer una mueca similar a la sonrisa, dependiendo de las horas
que haya dormido- a cada persona con la que se cruza, incluido al chico del
chaleco de ‘Salvemos a los delfines ya’ que me trae por el camino de la
amargura.
Así que si yo, que la mitad de los días vivo al límite del
infarto y de perder la poca cordura que me queda entre pelirrojos malvados y
otros estreses añadidos, soy capaz de esbozar una sonrisa, no entiendo por qué
hay gente que se permite el lujo de ser tan desagradable en su paso diario por
el mundo.
Y es que últimamente me topo con mucha gente desagradable y
yo que estoy muy mal de lo mío y que desde que ha empezado el colegio tengo la
locura en niveles extremos me quedo atónita de ver cómo el personal no se cuida
ni un poco de tragarse la bilis en casa o pegar cuatro voces en familia y en
camisón –siempre impone más por aquello de la mala cara nivel muerta en el depósito-
antes de enfrentarse al mundo y a las pobres criaturas que lo poblamos.
Así, hay cajeras que me miran con cara de estar mordiendo un
cactus y me dicen ‘¿es que no ves que la cinta está rota?, empújame las cosas’ como
si estuvieran a punto de partirme la cara; hay dependientas que viéndome con los
ojos güertos de ‘tengo tres minutos para encontrar los leotardos’ me dicen eso
de ‘lo que ve ahí es lo que hay’ mientras mascan chicle y/o se mueven el
piercing de la lengua y me miran con una ceja levantada si oso hacer otra
pregunta; hay barrenderas que se empeñan en mojarme con la manguera aunque pase
pegada a la pared como si fuera un GEO en una misión de alto riesgo e incluso
hay limpiadoras que aunque me disculpe diez veces porque le estoy pisando lo
fregado me ladran como si fuera mi madre y yo me retrotrajera a los 8 años
patinando por el pasillo de casa…
Pero el colmo de los colmos fue hace unos días que en Málaga
se celebró el Mater Dei –como una mini Semana Santa infernal- a la que por
supuesto y en un arranque de locura transitoria decidí ir con la familia –merezco
todo lo que me pase- y allí la pelirroja y el primo decidieron refregarse por
todo su ser una piruleta de esas de colores que no saben a nada, rectifico, que
saben a rotulador y cuando ya estaban pegajosos como las manos locas aquellas
de los Phoskitos y yo trataba de quitarles lo que podía con un kleenex que se
les quedaba pegado en los mofletes, de pronto la luz se hizo frente a mí al ver
a una muchacha que de espaldas a mí sacaba una toallita para limpiarle la cara
a sus retoños, tan o más sucios que los nuestros.
Así que, ilusa de mí, como si fuera la cosa más normal del
mundo, decidí pedirle si por favor podría darme una toallita y la muchacha –a partir
de ahora la bruja maleducada- sacó una –cuidado, vayamos a arruinarnos- y me la
dio levantando la mano, sin ni siquiera girarse hacia mí ni decirme
absolutamente nada, salvo poner una mueca de asco, como si yo fuera la mujer más
gorrona del mundo y le acabara de pedir dos litros de plasma sanguíneo.
Como soy imbécil, cogí la toallita, di las gracias y me quedé
petrificada, sin decir nada mientras ella se perdía entre el gentío moviendo las caderas
como si se creyera Heidi Klum.
Claro, una es medio tonta pero no tonta del todo y a los
tres minutos de estar allí pasmada con la toallita en la mano y con la cara
partida, empecé a endemoniarme por no habérsela tirado a la cara, así que decidí
dejar a los niños pegajosos y sucios como huérfanos del siglo XVIII y rezar por
encontrarme a la pérfida miserable en cualquier callejón para hacerle la mirada
del tigre y meterle la toallita por el culo.
Pero sonriendo, siempre sonriendo. Que no se diga.
Sobra decir que no la encontré y que desde entonces me paso
el día inventando situaciones y conversaciones ficticias con todo lo que voy a
decirle cuando la vuelva a ver. Entretanto, me mato a lexatines.
Jolin que borde la tía.. Anda que y la den.. es cierto que hay mucha mucha gente desagradable, yo también intento tener siempre una sonrisa en la cara.. y hay gente que te la devuelve y gente que se cree que simplemente por eso, eres tonta y se pueden aprovechar de ti.. Así que ánimo.. y ya sabes que siempre hay alguien que te jode el día.. pero nunca les demuestren que lo han conseguido..
ResponderEliminarHa comenzado Violeta las clases de baile? LLeva castañuelas o no? Mi hijo comienza el jueves el Karate y se tira el día dando patadas al aire diciendo todo lo que va a hacerle al maestro, que por lo menos espero que ya que le voy a tener que ver dos días a la semana esté de buen ver..
Jajjaja, no, aún no... Esta tarde es la reunión, ya os contaré cómo va la cosa. Ayyy
EliminarOhhhhh eso me pasa a mi un monton,se me ocurren las contestaciones mas brillantes e ironicas...pero de 5 minutos a dos dias despues de lo debido,que es mas o menos lo que me dura el cabreo con el tonto del turno. Y si,creo que cada vez hay mas gente desagradable por ahi suelta,con lo mucho que yo me esfuerzo de ser siempre tan amable....sobre todo las dependientas,que las eligen por monas y por los 5 kilos de maquillaje y 3 de laca de pelo que llevan pero luego abren la boca y huyo de la tienda para no volver jamas...o estamparle el collar en la cabeza,depende del dia que tengo. El otro dia termine poniendo la hoja de reclamaciones...y tan agusto me quede!!!!
ResponderEliminarMuy bien!!! Ésa es la actitud!
EliminarJajajajaja. A mi me pasa también eso de que en un momento dado no sabes responder porque te pilla por sorpresa lo que sea y luego, cuando ha pasado algo de tiempo, me vienen miles de respuestas que podría haberle dado a la persona en cuestión, jajajaja. Qué rabia da eso.
ResponderEliminarAnda que la petarda esa....qué tía más petarda...Cuidado, que una toallita le va a costar una ruina....vamos, vamos....Le deberían de haber pegado la pelirroja y el primo la piruleta en el culo, jajajaja.
Ah, y odio a las dependientas que te dicen con cara de asco "lo que hay ahí es lo que queda". Vale, que no hay más en el almacén, pero no hace falta que lo digan con esa cara de asco....
¡Besos!
Y encima eran de Carrefour, vamos, que le saldría a 0.001 euro... Perraaaa
EliminarA lo mejor a la pobre muchacha otras 354 madres que no llevan toallitas en el bolso (es que tu tambien muje!!) ya le habian pedido una, y cuando llegastes tu no pudo mas y simplemente levanto la mano y te la dio, por no decir "que coño les pasa a las madres de hoy que no vienen equipadas??"....jajajajajajajaj
ResponderEliminarY que conste que no soy yo, porque yo no me contoneo como Heidi Klum...basicamente porque tengo el mismo cuerpazo...jajajajajajjajajajaajajajjajajajajajajajjajajaj....buenisimo el chiste!!!
Niña, no gastes energía en pelearte delante del espejo, descansa relajate que ya es decir!!
Que no, que la gente es muy borde. Yo he llegado a darle un paquete entero a madres que se han olvidado de llevarlas, incluso pañales y siempre sonriendo porque todas las que somos mamás sabemos cómo tenemos la cabeza y tenemos que ayudarnos porque somos del mismo club infernal. No tiene excusa! A las trincheras!!
EliminarPd. Es que iba sin el peque y con mi minúsculo bolso nuevo y creí que con los kleenex sería suficiente... Nunca mais.
jjj.. Gracias por ese guiño a los gallegos con tu Nunca mais!!!
EliminarAqui también te seguimos y aunque juré no leerte más en la ofi porque algunos días me río en alto, no lo puedo remediar..... Es lo primerito que hago!!!
A mí me repatean cuando te dicen el "eso es lo que hay" sin ofrecerte más ayuda o preguntarte si quieres ver otro modelo.
ResponderEliminarPara matarlas. y cuando quieres ver tranquilita sin que nadie te diga nada, te acosan. No hay quién las entienda.
EliminarYo estoy más que harta de la gente borde. Y me pasa como a ti. En el momento me quedo petrificada y se me ocurren un montón de respuestas ingeniosas cuando ya no hay nada que hacer... Soy una pusilánime. Besotes!!!
ResponderEliminarVamos a tenerq ue ensayar!
EliminarBuffff valiente tía siesa!!! a mí me suele pasar lo mismo... se me ocurren las contestaciones justo 10 segundos después... cuando ya es demasiado tarde!!! pero hace un par de semanas en el Decathlon petado... se me empotró una tía encima que venía corriendo sin mirar... no sólo me pisó, se chocó conmigo!! y ni aun después de ver mi barrigón de preñada me dijo nada... hizo ademán de pirarse y solté yo: "¿ni un perdón me va a pedir siquiera, encima que viene sin mirar?" y lo mejor fue que la gente de alrededor se quedó mirándola mientras se iba... sin pedir perdón, pero colorada!! jajaja (con qué poco se contenta una...)
ResponderEliminarEso mola!! Por maleducada!
EliminarMe uno al club de no saber que contestar en situaciones x,luego en casa practico delante del espejo,las pongo verdes y moradas y me quedo tan a gusto...que hasta los churumbeles lo agradecen,hay de todo por la vida,iba a decirte que te olvidarás de la mini semana santa,pero chasco,tú vete,vete,que así nos quedará otro post tan genial como este.PD- no puedo con las dependientes puedoayudarpuedoayudar,es todo mentira,cuando pides ayuda de verdad,se hacen las sordas.Luego están las que remueven cielo e infierno por ti,nunca pierden la sonrisa y te llaman a otra tienda.Claro,que visto así,no sé si será para perderme de vista....uffff,que lío.La de los churumbeles.
ResponderEliminarJajjajajja, el espejo es lo mejor para el desahogo!!
Eliminarhace cosa d 15 días vemos a un pobre sr d unos 60 años intentando empujar el coche....mi marido y yo nos bajamos a ayudarle,su sposa staba dntro dl vehiculo y nosotros y el sr. empujando ...cuando x fin arranca se mete en su coche y se va....se va sin decir adiós sin decir gracias sin decir na d na....es d bien nacidos ser agradecidos.
ResponderEliminarNo me lo puedo creer!!!!
EliminarYo soy de las que digo que me estoy volviendo una antisocial. Hay tal cantidad de gente desagradable, poco educada y falsa que si no fuese por el peke me iría a vivir a un monte. Con lo poco que cuesta ser amable y educado... en fin...
ResponderEliminarPero en los montes hay bichos...
EliminarMe encantan los bichitos, más le temo a los de dos patas...
EliminarActitud Zen Flor...actitud zen...no importa lo que hagan los demás sino cómo se lo tome una.
ResponderEliminarY si no, siempre puedes hacer una muñequita vudú con un agujero en el culo para insertar toallitas :D
Jajjajajajjajajajajjaja, me encanta!!
EliminarNo es por ser hipócrita, pero últimamente me dice mucha gente 'me encanta lo feliz que pareces, lo sonriente que estás siempre y que siempre tengas en la boca un buenos días, hasta mañana y que si te gusta cómo vamos ese día vestidas, maquilladas, o nos veas especialmente guapas, nos lo digas'
ResponderEliminarNo sé, yo soy así desde chica, pero aunque seas más seca o tímida, una sonrisa y un buenos días no cuesta nada...
Besotes Flor!!!
Pd: Han sacado al mercado unos chupetes enteritos de silicona bonitos! Busca en tu farmacia porque el azul lleva el nombre de Nicolás y lo podrá llevar hasta por la calle ;)
Di que sí!! Yo también suelo estar alegre prácticamente siempre y eso acaba contagiando!
EliminarGracias por lo del chupe, pero al final el propio Nico decidió que los de goma ni mijita y usa de los requetebonitos!!! Vivaaa
¿Por que siempre se nos ocurren las grandes respuestas 30 segundos tarde?
ResponderEliminarNada, hasta que seamos más rápidas sólo nos queda ir con la mejor sonrisa que podamos sacar, y el consuelo de que los desagradables se quedarán jodidos por que no nos pudieron estropear el día (luego ya en privée pegamos unos cuantos berridos relajantes)
bbb
No podrán con nosotros!!!!
EliminarY un día o dos despues! Mis respuestas son la caña para dejarte acojonado vivo... Pero siempre tarde. Besos Flor
ResponderEliminarCómo te entiendo!! jajajja
EliminarSi es que tías petardas con complejo de Dios hay en todos lados, yo no valgo para ser una borde o pegarle un buen corte a nadie, tengo un filtro mental que me impide ponerme en plan ordinaria cuando me tocan las narices, por eso voy siempre con mi hermana, que es experta en dar contestaciones ingeniosas cuando alguna se pasa de lista, tiene respuesta para todo, ella si que no tiene ningún tipo de filtro, y lo como se los toquen se queda tan ancha. No dejes que ninguna mindungi, teleoperadora o dependienta estresada te amargue el día.
ResponderEliminarPréstamela!!! Aunque lo cierto es que mi hermana también es perro de presa, jajajja
Eliminar¡Si es que hay gente pa' tó!
ResponderEliminarGente malaaaaa!! jajjajaja
EliminarMenuda iimbécil.bien podría haberse ahorrado la toallita sin necesidad d poner caras , yo no voy sonriendo a todos ni falta q hace y cuando se m agota la paciencia q no es mucha soy muy capaz d mandar a la m....o a sitios peores a quien me importune , los panchitos teleoperadores me tocan especialmente la moral y al ultimo q me llamó le dije sin cortarme un pelo q se fuera a tomar por saco....gilipolleces las justas!
ResponderEliminarYo cada vez me corto menos y hago algún comentario..... porque fue amable que te dio la toallita, pero tan desagradable. Por ahora las sonrisas son gratis...que en un futuro nunca se sabe
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