Cuando una es madre y tiene que enfrentarse a sus bestias y
hacer de ellas seres lo más civilizados posible y cuanto menos bestias mejor,
tiene que darlo todo, echar toda la carne en el asador y dejarse la piel en el
asunto, que las bestias son bestias pardas y vienen asalvajadas de fábrica aunque
lo disimulen con sus dientecillos de ratón y sus tirabuzones rojos, como el
gato aquel que cogió una amiga de la calle porque era chiquito y estaba solo
con sus ojitos verdes soñadores y le destrozó el sofá y se comió media cortina
en dos días. Pues eso mismo.
Como digo el trabajo es duro y no siempre grato y como diría
Jack Nicholson en 'Algunos hombres buenos', a veces hay que tirar de técnicas de ética
dudosa si queremos ver resultados, que luego usted querrá que mis pelirrojos no
salten sobre su sofá ni correteen entre las sillas del restaurante ni griten en
el cine, pues mire usted eso tiene su trabajo y es un trabajo bien difícil.
Así que yo, que ya tengo los niveles de autoridad por los
suelos, he de tirar de inventiva y mala leche, por qué no decirlo, para hacer
que la pelirroja entre en vereda y dado que mis gritos autoritarios sólo
funcionan una de cada tres veces y que mi mirada del tigre ya no es lo que era
con esos cercos de crema de contorno de ojos que llevo en pegotes por las
ojeras cuando estoy en casa, he tenido que tirar de ingenio y bilis y aprovechando
que un día la nena me preguntaba por qué Maléfica tenía cuernos, le dije que
los cuernos le salen a las niñas malas y desobedientes, que Maléfica una vez
fue una niña buena pero que fue haciéndose cada vez más y más mala y más y más,
hasta que le salieron los cuernos y se convirtió en bruja.
Tal fue la cara de espanto que me puso que casi me
arrepiento, pero luego recordé al hombre del saco, al chupacabras y al
sacamantecas y me vine arriba. Total, ¿qué son unos cuernos comparados con que
te destripen? Así que los cuernos malhechores se quedaban con nosotros y mire
usted, mano de santo.
Que si la llamo siete veces para que se ponga los zapatos y
no me hace caso y empiezo a entrar en bucle de violencia callejera, suelto un: ‘Mira
que como sigas así te van a salir los cuernos…’ y antes de que pueda terminas
la frase la tengo abrochándose las sandalias con los ojos desencajados. Y si no
quiere recoger los juguetes y ya le da igual que la amenace con la escoba en la
mano dispuesta a tirárselo todo, nada como un ‘Mira que te van a salir los
cuernos…’ y hasta despega las pegatinas de las princesas que tenemos pegadas
por toda la casa. Una bicoca.
Pero el otro día en uno de mis cuentos aleccionadores de por
la noche, la pelirroja me pidió que le contara un cuento de una niña a la que
le salieron los cuernos por mala ‘malízima’ y empecé a contárselo, pero cuando la
chiquilla del cuento tenía los cuernos por haber sido ‘puzermala’ me dio un
ataque de culpa y como además los cuentos han de tener un final feliz le dije
que la niña se echó a llorar y decidió que ya siempre sería buena y tan buena
fue que una mañana se despertó y ya no tenía cuernos.
La pelirroja aplaudió, empática como ella sola y yo me sentí
bien de no ser tan despiadada, que siempre ha de haber una puerta abierta al
arrepentimiento y a las segundas oportunidades.
Y esta mañana cuando le dije que hiciera pipí, que llegábamos
tarde al cole siguió jugando con la cocinita y cuando la amenacé con los
cuernos, me miró y me dijo: ‘Yo ez que he tenido una puzeridea, mami, mejor yo zoy normal
y zi me zalen loz cuernoz entonces me hago puzergüena y ze me caen… ¿a que zí? ¿a
que ez una puzeridea?’
Definitivamente, debí apostar por el sacamantecas.
Tienes que reconocer que es una puzeridea de las buenas buenas XD Yo suelo usar el chantaje emocional, tipo es que os gusta que mamá esté tristeeeee por lo mal que os portaiiiiiiiiiiiiiiiis. Pero lo de los cuernos mola... XD
ResponderEliminarLa pelirroja sólo responde al terror! jajja
EliminarÉsta niña es genial! Yo con lo más que he amenazado al peque ha sido con que si no es bueno le va a crecer la nariz y las orejas como a Pinocho, y cada vez que hacía algo se las tocaba aterrorizado para ver si todo seguía en su sitio.. Hasta que empezó a ir por la calle y a todo aquel que tenía una nariz u orejas descomunales, me decía que esos eran chicos malos y encima feos.. jaja Y el colmo fue cuando vio a su padre duchandose, y mira que aquí no nos escondemos, pero se ve que ese día le llamó la atención su pichu como dice él y le dijo mentiroso en toda su cara.. y que él no quería que le creciera como a papi.. jaja Así que dejamos de asustarle que no estamos preparados para las contestaciones de éstos niños..
ResponderEliminarBesos..
Jajjaja, pobre!
EliminarLa pelirroja te chulea, ¿eh?. Anda que no, que a ella le vas a venir tú con cuentos, sí, sí...
ResponderEliminar¡Besos!
Y eso que para lo que quiere está empanada...
EliminarJajajjjajajajajajaja eso te pasa por tener buen fondo chiquilla!!! Hay que mantenerse firmes hasta el fin!!! Ahora tendrás que buscarte a otra superbruja con la que amenazar
ResponderEliminarExacto! Hay que ser malvada!!
EliminarEsta pelirroja es puzerocurrente. Si es que no podemos flaquear, ya que cuando nosotras vamos, ellas ya han venido.
ResponderEliminarUna sobrina mía, destroyer donde las haya, estaba haciendo el salvaje y su madre, con tono de desesperación le dijo..."estate quieta, hija, que te vas a dar un golpe y se te va a poner el ojo morado". No se le ocurre otra cosa a la enana (3 años) que decir con cara de alucinada..."¡morado, qué bonito!"
Jajajajja, no puedes fiarte!!
EliminarJajaja, si es que nos torean como quieren, no se puede ser buena.
ResponderEliminarYo aún estoy buscando mi estrategia, no me sirve ninguna con el pasota este. Pasa de chantajes, gritos, amenazas o cates en el culo, le resbala todo. ¿Alguna "puzeridea"?
Tampoco me funciona las caritas sonrientes o estrellitas de premio, passssa de tó.
Si te sirve de consuelo, me pasa lo mismo con mi hija, me importa poco lo de "mama esta triste" "me enfado"....asi que yo tambien me apunto a recibir "puzerideas"
EliminarConsejo de malamadre: Buscad algo que le dé miedo y amenazarla con ello... Pero miedo de verdad, en plan brujas y eso... Mano de santo!
EliminarEso sí, luego tendremos que llevarlas al psicólogo...
He leido el resto de los comentarios y llego a la conclusión de:
EliminarNo le da miedo nada.
Como no come nada no le puedo quitar cosas que le gustan.
Si le quito la tele le da igual, se queja en ese momento pero se conforma y me la lía por otro lado.
Si le quito los juguetes idem.
Si no vamos al parque ni lo pide.
¿Qué hago con ese coloraoooooo?
No se puede flaquear ni un instante. Ya lo sabes, sin piedad ninguna.
ResponderEliminarNi uno!!
EliminarTal cual la vida misma.... Me parto.....
ResponderEliminarYo me vi en una parecida, cuando uno de mis hijos me contó una mentira y yo, evocando a Esopo, busqué una fábula con el cuento del pastor mentiroso...
Están tan acostumbrados a los finales felices, que ya esperaban que el pastorcillo trolero tuviera a sus ovejas intactas!!!!
Mientras contaba el cuento a mis renacuajos, los vi que se reian y que no cogían bien el mensaje, asi que me vi a mí misma exagerando la desdicha del pobrecito: Todas las ovejas devoradas, ni una se salvó, ni los bebés ni las abuelas ovejas.... Ninguna. Todas muertas.
Me dio dolor de corazón, sus ojillos mirándome con pena, pero valió la pena no flaquear, porque los dejé tan horrorizados que nunca más. Bueno, hasta la próxima trola….
Pedro y el Lobo?? jajajjaja, yo también lo utilicé... pero al final cambié el final por blanda. Merezco un serio correctivo!!!
EliminarMi hija tiene 2 años, edad suficiente para empezar las maldades pero insuficiente para saber de princesas con cuernos (aun no hojea el hola...juas juas), chantajes, amenazas....vamos, que ahora mismo estoy en una especie de limbo que ni palla ni paca...
ResponderEliminarY encima yo tengo la autoridad de un oso amoroso...
No somos nadie!!
EliminarJajajaja. Tu pelirroja ha dado con el quid de la religión. Haz lo que te dé la gana y arrepiéntete luego para ir al cielo. Jajaja. Besotes!!!
ResponderEliminarPues sí!! jajajja
EliminarJejje, me parto y voy a probarlo a ver si a mi también me funciona. Por cierto el viernes conociste a mi marido e hija rubia en el cumpleaños....jeje
ResponderEliminarEl mio es un trasto, y hace las cosas cuando nadie le contralo que es alucinante que no le pillamos nunca, asi que mi marido se invento que los padres teniamos una maquina (es un movil antiguo jajajaja) en el que los padres veiamos todo lo que hacian los niños, y oye como funciona jajajaja, hace menos trastadas y cuando queremos saber si miente o no en algo le decimos vamos a verlo en la maquina y no veas como suelta todo por su linda boquita jajajaja, lo malo es que ya tiene 7 años y la mentira no nos va a poder durar mucho jajajaja
ResponderEliminar¡puzer puzer puzeridea!!!!! Ay, alma de cántaro, que te la mete siempre dobláááá.... Cuando se cuenta una trola de ese calibre, hay que mantenerla hasta el final, que luego pasa lo que pasa.
ResponderEliminarBesos.
Madre mía... si es que los niños son listísimos... cómo discurren!!! jajaja tu pelirroja ha estado sopesando los pros y contras de ser buena siempre... frente a los de hacer acto de contrición... y estos han salido ganando!! me parto...
ResponderEliminarPues yo opino que no hay nada como una buena amenaza para mantener a raya a las bestias, jajaja, lo que me he reído con los cuernos de Maléfica
ResponderEliminarNunca des marcha atrás,tenías que haber seguido por el camino cuernos,cuernos y de los que crecen mucho,jajjaj si es que con la pelirroja no puede uno ni echar una cabezadita.Yo uso el método ese,cuando veo que decae,me invento otro,el caso es que se cagen de miedo y atiendan a razones,pero que poco me dura.....ainnss,no me han salido nada ingenuos.La de los churumbeles.
ResponderEliminarYa estoy cogiendo ideas para cuando tnga que meterle el miedo en el cuerpo a Hugo jeje , aún es pequeño pero apunta maneras...lo d t voy a dar en el culo y amenazarle con parar la canción q le gusta a la hora de comer cuando se pone burro es lo máximo actualmente
ResponderEliminarA mi lo que màs me funciona es privaciOn. Es decir, castigarla sin hacer esas cosas que tanto le gustan: comer chocolate o flan, ver los dibujitos (aunque esto me penaliza a veces también porque no me queda ni un ratito de tranquilidad), ir a jugar a casa de los amigos, sin hacer puzzles juntas...
ResponderEliminarEl miedo miedoso también lo he utilizado a veces pero me ha jugado malas pasadas porque luego tiene pesadillas y me despierta todas las noches unas cuantas veces. Si es que no hay soluciOn perfecta, no...