Como ya sabréis y si no, os lo recuerdo yo, a la pelirroja
le habíamos quitado el chupete por el día y habíamos reducido su adicción
exclusivamente a la noche, básicamente para asegurarnos un buen descanso, que
todo hay que decirlo, lo que nos costó un mes de llantos, sobornos y chantajes
emocionales de la nena que no le encontraba sentido a la vida sin poder
succionar su chupete.
Pero aunque tuve que luchar contra el pater y contra mi
madre y contra media España que me decían que la nena era aún muy chica y que
yo era muy malvada, logré mi objetivo aunque de regalo me llevé un par de
crisis nerviosas nivel usuario y un poco de inquina por parte de la nena, que
desde entonces me tiene vigilada.
Pues después de todos esos meses reservando el cáliz sagrado
para la noche y lograr estabilizar la situación, ha llegado la hora de hacer el
abandono definitivo del succionador, aunque me cueste una alopecia salvaje y
una hipertensión crónica y lo que es peor seis meses sin dormir, con lo mal que
llevo yo eso del insomnio.
Hay que dejar claro que yo soy una madre pusilánime y vaga a
la que le aterran los cambios drásticos en la crianza –que bastante dura es- y
además tener que enfrentarse a la facción dura familiar, pero a la nena se le
estaban empinando cada vez más los dientes, así que antes que acabara como José
Vélez, me decidí a incluirlo como uno de los propósitos maternales de año
nuevo.
La cuestión es que decidimos dárselo en ofrenda a los Reyes
Magos a cambio de los juguetes, siguiendo vuestro consejo, y la nena accedió
encantada, que se ve que ha salido igual de consumista que su madre… La noche
de Reyes la dejamos acostarse con él y en mitad de la noche se lo quitamos cual
malignos malandrines para esconderlo para siempre.
Al día siguiente con todo el jaleo de regalos, la nena
seguía encantada con el trato porque aún no había sufrido en sus carnes el
síndrome de abstinencia y esa noche tampoco lo sufriría porque se quedó dormida
en el coche, en el camino de vuelta a casa y todo fue felicidad maternal.
Pero claro, aquello no podía durar para siempre y a la noche
siguiente, la del día 7, la nena empezó a pedir su chupete, primero bajito y
luego entre sollozos, alegando que volvieran los Reyes y se lo llevaran todo y
le trajeran su pequeño trozo de silicona. Y antes de que el padre –entregado al
pelirrojismo hasta límites extremos- se abalanzara sobre el cajón que contiene
el oscuro objeto de deseo, logré placarle con un pie mientras yo le soltaba a
la pobre niña el rollo de que ya era mayor y que los Reyes –cabrones- le habían
dado su chupete a un bebé muy chiquito que no tenía… y así como por arte de
magia, la pobre pelirroja con la cara fucsia y húmeda de las lágrimas y los
refregones, me soltó un vale entre hipidos pero que le diera la mano todo el
tiempo. Y se durmió.
Y me dio tanta pena verla tan resignada y tan mayor, tan
buena y tan generosa con el bebé chiquito inventado que a punto estuve de sacar
el chupete y ponérselo, que las madres bipolares es lo que tenemos, pero no,
aguanté y así vamos, que ya llevamos tres noches sin chupete y yo con el corazón
en un puño y los ojitos güertos esperando la gran pataleta que de momento no ha
llegado, aunque eso sí, todas las mañanas a eso de las seis, llora desconsolada
y pregunta por su chupete y hoy al entrar en su habitación con el móvil
encendido para verle la carita la pobre ha preguntado entre aplausos ‘¿vamoz a
buzcar el ssshupete?’... y yo, con los pelos tiesos y la tos de tísica que me
acompaña desde el inicio de las navidades, he sido consciente de lo dura que es
la maternidad. Otra vez. Ay.
Me ha enternecido mucho tu blog de hoy. Te confieso que mi hija no fue nunca de mucho chupete y por eso no le costó demasiado pasar de él. A los 8 meses ya no lo quería, por lo que fue fácil prescindir del "tete" pero es verdad que cuando quieren algo y te miran con esos ojitos te duele el alma y te dan ganas de tirar toda la pedagogía al cubo de la basura. Un beso y feliz año a todas.
ResponderEliminarA mí lo del chupete es lo que más pena me da porque ella estaba como loca con él y no sé que tendrá, pero la calmaba de todo mal... pero ahora me toca quitárselo, más porque se le están poniendo los dientes finos, que si no...
EliminarAins que penita me da el tema chupete.... en mi caso nunca lo han usado en exceso, vamos que solo lo utilizan para dormir, el problema está en que si no fuera por ella él ya lo habría dejado hace tiempo. De momento intento chantajearla con el hecheo de que es mayor para chupete, pero claro la pobre me mira como diciendo "¿mayor yo?"
ResponderEliminarSerá cuestión de tiempo y paciencia digo yo...
Yo no soy muy amiga de los cambios -por vaga y por penita generalmente- pero la niña es de paladar estrecho y no quiero empeorar más la cosa, sobre todo porque ella era de llevarlo tooooodo el día... Pobre
EliminarQué tiempo tienen los tuyos?
Acaban de cumplir los dos años... y utilizarlo solo lo usan para dormir y en medio de la noche lo sueltan asique no es un tema que me preocupe en exceso aunque tengo ganas de librarme del dichoso chupete jejeje...
EliminarFrases como "me soltó un vale entre hipidos pero que le diera la mano todo el tiempo" me tienen a mí también entregada al pelirrojismo. Forever.
ResponderEliminarMi experiencia con el chupete ni la cuento. Que también tengo en contra a toda la familia, pero además es que se lo dan cuando yo no estoy así que mi trabajo es en balde. He tirado la toalla. Eso sí, la ortodoncia la pagan mis padres, mis suegros y mi marío. Eso te lo digo yo.
Sólo te diré que cuando se lo quité durante el día con todo el trabajo de mi corazón, fuimos de visita a casa de la abuela -o sea mi madre- y antes deq ue pudiera darme cuenta le había comprado un chupete rosa que la niña lucía encantada... Y así todo el tiempo...
EliminarDe todas formas si la niña tuviera la boca normal, no me preocuparía hasta los 7 años! Lo que pasa es que se le está estrechando el paladar... Ayyy
No te preocupes Flor,en unos días ya no se acordara del chupete,mi rubito nunca quiso chupete pero te entiendo perfectamente cuando dices que te miran con esos ojitos y tu pensando seré bruja y mala que le estoy contando una trola al pobre,pero tu piensa que es por su bien y el tuyo piensa en la pasta que te vas a ahorrar en correctores dentales.Un besito.
ResponderEliminarEso espero!!!
EliminarLa pelirroja es una campeona, pero desde luego los niños se adaptan mejor a los cambios que nosotros
ResponderEliminarY nunca nos acordamos!
Eliminarpobreee peliroja..... y pero ya te esta demostrando lo grande que se esta haciendo, sus pequeños momentos de debilidad, peroooooo, yo creo que tambien se llevaron mi chupete los Reyes (cabrones) Magos, algo me suena.....
ResponderEliminarCon razón decía la pobre que eran los Reyes Malos, algo sospechaba... jajajja
EliminarVaya! Que penita que dan cuando te miran con los ojitos llenos de lágrimas, pero ya verás como es una campeona y le pasa enseguida; a la mía se le rompió y le dije que era mayor para chupete (pobrecilla, tenía 18 meses) y solo preguntó por él la primera noche.
ResponderEliminarBesitos y ánimo con tus propósitos!
Qué penita dan...
EliminarUf! en mi casa también se han llevado los Reyes los tetes, teníamos 2, preciosos, y que sólo usábamos por la noche para el descanso de todos. La pequeñita los dejó en la bandeja junto a los 3 alfajores y las 3 copitas de vino de cocinar, tan contenta, para que los Magos se los llevaran a niños que los necesitaban más...desde entonces, lo que antes tardaba 5 minutos, ahora se alarga a 1 hora para dormirse, a base de cantar, lloriquear, llamar a mamá, llamar a papá, dejar la luz del pasillo encendida...tan malo es el tete, joer! me siento mal porque veo que se quiere hacer la valiente pero en cuanto la tapo se le saltan 2 lagrimones y pone puchero...o lo superamos pronto o yo le casco un chupete pero ya!
ResponderEliminarYo te lo digo en serio, a la mía porque se le están deformando los dientes que si no se lo dejaba hasta los 18!!
EliminarAy Flor!
ResponderEliminarYo estoy igual...ahora mi hija se despierta 3 ´0 4 veces por la noche y me tengo que tumbar a su lado porque tiene miedo....Yo también se lo he quitado por los dientes pero es que su madre (osea yo) lo llevó hasta los 4 años!!
En fin paciencia....no nos queda otra.
Enhorabuena por tu blog!! Me encanta como escribes...y vuestras historias!!
Ana
Muchas gracias, compañera de sufrimiento!! jajaja
EliminarBravo por la pelirroja!!
ResponderEliminar...Ya comenté que mi marido se vistió de Santa, y esa mañana entre que tenía los ojos pegados y estaba emocionado al verle se lo dio, lo pidió solo esa noche y se acabó... Pero yo también se lo hubiera dejado hasta los 18, que estaba tan bonito con él, me hacía sentir que todavía era un bebé.. Aunque eso si, el sigue durmiendo con su gasita que tiene desde bebé, la arrastra por toda la casa y cuanto más sucia está más le gusta, al principio tenía varias, que lavabamos a diario y listo, pero hace un año que solo quiere una, y cuando se la lavo y la coge, empieza a gritar como loco... YA NO ME GUUUUUUSTAAAA, ESTÁ LIMPIA, YO LA QUIERO SUCIA... (Al menos tiene ese consuelo,eso si que no se lo quitaré hasta que quiera)...jaja
Jajjajaj, pobre...
EliminarPobrecita la pelirroja,que pena me ha dado,si debe costar un montón deshacerse del chupete,lo digo por mi,que pase a chuparme el dedo,mi madre loqueaba,los churumbeles no sufrieron nada,porque fue algo que pasaron de usar,todo el mundo a decirme enchufalos al chupete,pero ellos ni caso,mucha suerte con la andadura,ya verás que se olvida del dichoso en nada.La de los churumbeles.Un saludo.
ResponderEliminarEso espero!!
EliminarYo a mi niño lo tenia aleccionado para que el dia de Reyes lo dejásemos en el árbol, se lo iba a llevar Baltasar y le iba a traer muchos regalitos pero una noche a primeros de Diciembre cuando iba cogerlo para darselo no lo encontré (la chica que viene a limpiar a casa lo habia guardado, y aunque la llamamos para preguntarle donde estaba, no se acordaba). Asi que la historia pasó a que el chupete se habia ido al cielo con el Niño Jesús. Lloró esa noche, pero las demás ya no.
ResponderEliminarEso si, como en casa de mis padres tenía otro, lo primero que hizo cuando llegó fue ir a buscarlo, menos mal que la abuela estaba aleccionada y también le contó la historia del Niño Jesús.
¡Que lástima me dió! Lo curioso, es que tengo un bebé de 4 meses que tiene chupete y en ningún momento se lo ha querido quitar al hermano, solo pregunta alguna vez que cuando se va a llevar el Niño Jesus el chupete del hermano
Herenia Piñero
jajjajajaj, pobrecito, lampando por el del hermanito!, jaja
Eliminar¡Hola Flor! ¿Cómo va todo? yo a mi niño este verano se lo quité de la calle, sólo lo lleva en casa, lo cual quiere decir que en cuanto entra por la puerta va directo como un poseso al cajón; llevo la intención de reservarlo sólo para dormir este verano (a ver cómo me va) y las navidades próximas hacer como tu, ya veremos el resultado.
ResponderEliminarLa mía es que tenía pasión por el chupete!!
EliminarEl mío se lo llevó el camión de la basura, es mucho mejor odiar a la mierda que a los reyes magos, jajajajaja, pero el rubio lo dejó él sólo, no le gustó nunca al pobre...
ResponderEliminarjajajajjajajajjaja
EliminarAins que penita... tira ya ese chupete y se te quitarán las ganas de dárselo. Es por su bien! Y lo guapa que estará de mayor con su dentadura perfecta? Vaya niña más buena que estás criando, te puedes sentir orgullosa.
ResponderEliminarGracias!!!!!
EliminarNo, no tires el chupete que yo llevo el mío de cuando nací en las llaves con toda la ilusión del mundo, me encanta conservarlo.
ResponderEliminarLo guardaré!
Eliminarayyy Susana que tierno,el mio pequeño tambien tenía una,para dormir se la ponía en la cara y todo el día con ella en la mano,no hay foto en la que no salga,y que bien olia,llena de babas y restos de todo,no me quedaba otra que lavarla a escondidas y más de una vez secarla con el secador.La tengo guardada,limpia,eso sí.Carmen.
ResponderEliminarSIIIIII que bonitos son con su gasita .. además les encanta manoseada y oliendo a ellos, hasta los dos años, le daba una cada día, más bien le ponía una a juego del modelito que llevara.. las tengo de dibujos, lisas, con bordados, de colores, creo que estaba mas obsesionada yo por aquel entonces que él, pero es que le veo de bonito con ella siempre en la mano, se la pone por la cara, se la quita, la estruja, es su mayor consuelo, pero ahora que solo quiere una, yo también la lavo a escondidas, y la seco con el secador, o enciendo la calefaccion solo para la gasa.. jaja Ayyyy yo también la guardaré Carmen, pero no sé si limpia o sucia.. jaja Un beso
EliminarQué bonitooooo
EliminarAy, qué tierna tu pelirroja. Y qué penica. Casi me alegro de que mis niños no lo hayan querido...
ResponderEliminarMe ha encantado lo de la madre bipolar, yo también soy un poco de esas, jeje.
Un abrazo y ánimo.
Yo cada día soy más bipolar!!! jajaja
EliminarTú sigue así de dura, que como vea que bajas la guardia va a ir directa a la yugular. ¡Chupetes fuera!
ResponderEliminarBesos
No te rindas, Flor, que esto lo tienes dominado. No des el brazo a torcer, por lo que más quieras, que si no va a recibir el diploma de la carrera con el chupete puesto y en el insti la llamarán Maggie (como la de los Simpson) y tendrá una adolescencia traumática. Un besote!!!
ResponderEliminarTu post ha llegado a lo más profundo de mi corazón, de verdad. Y yo que pensaba que lo más duro iba a ser quitarle el pañal...
ResponderEliminarSiéntete orgullosa de tu pelirroja, que es una monada, y aprovecha que te queda poco de monería, que esta niña demuestra una madurez muy precoz, lo que significa que se le puede adelantar la pre-adolescencia ;-)
Yo con 2 años y medio regale mi chupe al Niño Jesus en el belen en la iglesia....jijiji Tmb llore los primeros dias pero como mis abuelos me tenian ya desde chica criada como buena cristiana, me conforme con saber q el bebe Jesus lo necesitaba mas q yo.....jajajajaja Acabo de descubrir tu blog y me encanta, sigo leyendo "patras" ;)
ResponderEliminarEl chupete de mi niña se lo llevó el camión de la basura y no hubo problema.Pensé que le iba acostar más.Esta tiene un conejito que no suelta ni a la de tres.pero tuvimos que buscar un sustituto parecido pq el original estaba de asco y lo más sorprendente es que se quedó convencida que era el mismo.bendita inocencia.
ResponderEliminarCómo te entiendo. A mis niñas se lo llevó papa Noel y aunque no se acuerdan de él, ni lo quieren, lo que antes eran 5 mint para dormirse, ahora es una hora larga. Y por supuesto, las siestas,q tan bien nos venian, se han acabado,
ResponderEliminarAl igual que tu, si no hubiera sido por la boca, hubieran llevado chupete hasta los 30. Jejeje.