La jungla. Esta
es una atracción presuntamente familiar en la que cinco individuos
inconscientes se suben en una barca redonda y bajan y suben cuestas y cataratas
entre gorilas de plástico made in Taiwán y ruidos de monos en celo. No sé si lo
peor fue el acabar con el rimel corrido de las bocanadas de agua que tragamos
cada vez que la barcaza saltaba, el culo chorreando de la balsa de agua del
asiento -que me obligó a ir enseñando el trasero transparentado por toda la Feria- o el cara a cara con
la muerte que tuvimos la pelirroja y yo, las últimas en acceder a la barca
infernal justo cuando ya estaba en movimiento. Nosotras que somos de agilidad
reducida. Si no hubiera sido por el ‘acomodador’ rumano que se partía en mi
cara, igual hoy sería cadáver. O seguiría en la jungla haciendo de extra junto
a la cebra paticorta.
Las camas elásticas.
Lo curioso es que siempre pensé que la niña sería una asustona para esas cosas
como su madre, pero no. Todo lo contrario. Y desde la primera vez que vio las
camas elásticas con arnés vivía sin vivir en ella. Y no me da tiempo de
colocarle las correas cuando ya está saltando como una gigantopulga pelirroja
muerta de risa, mientras yo, madre cagona por excelencia, cuento los minutos
que quedan para que se abra la cabeza contra el hierro que bordea la cama. De
momento, el único incidente fue una patada mortal que me llevé en la coronilla
y con la que he perdido tres centímetros de altura y los recuerdos de 1998.
El tren de la bruja.
Este año nos hemos librado por el momento y por mis maniobras de distracción
porque el año pasado, además del trauma de ver a la bruja –que en realidad era
un hombre con barba disfrazado de anciana con hirsutismo- tuvimos que pasarnos
tres semanas sufriendo los escobazos de la pelirroja con una miniescoba que le
regalaron en la atracción y que pinchaba como un erizo enfurecido.
Los patos. Vale
que no es una atracción sino una especie de juego en el que por 3 euros pescas
tres patos que parecen recién salidos de Chernobil y te dan un cutreregalo para
que los padres acarreen toda la noche. La pelirroja que es poco ducha en
trabajos manuales tuvo que ser ayudada por una servidora antes de que acabara
ensartando a la pobre mujer que regentaba el chiringuito y que se movía con la destreza
y la rapidez de Speedy González cada vez que veía a la pelirroja empuñar la
caña. Y a la nena le tocó elegir entre una imitación de los Littlest
Pet Shop o una minimuñeca ligeramente
bizca pero monísima. Pero como los primos eligieron dos pistolas con chupones,
la pelirroja y su falta de personalidad no pudieron resistirse y desde entonces
el cigoto teme por su vida.
Pero anda que no lo pasais bien.. jaja Nosotros nunca hemos coincidido de estar en ninguna feria con el peque. Pero aquí al lado está Gardaland que es un parque de atracciones enorme, y visto que el año pasado le encantó nos hemos sacado un bono anual, para llevarlo esas tardes de domingo que no sabes que hacer, pero al ser un parque chulo, está lleno, por lo que las colas son enormes.. así que nos vamos por la tarde noche que la gente ya está cansada y se va.. yo a las atracciones de agua no me meto, que luego como tú dices vas enseñando el culo mojado, eso le toca a mi marido, bueno, pensandolo bien casi todo le toca a él, que yo soy muy cagada con esas cosas..
ResponderEliminarUn beso enorme y que el fin de semana sea leve...
Jajjajaja, yo también!! pero claro, el pater se queda con el peque en casa...
EliminarEl tren de la bruja me encantaba, aunque a mí no me daban escoba para perseguir luego a mis allegados... Así no vale. Un besote!!!
ResponderEliminarPues vente a Málaga y te subes, aunque igual queda un poco raro a estas alturas, no? jajjaja
EliminarPues lo de la jungla no me suena... Las camas elásticas con arneses si, a mi hija también le encantan, pero aquí te las coloca el señor de la atracción (si tuviera que hacerlo yo igual la niña salía disparada al cielo a la primera de cambio) y al final, cuando ya han pasado los 5 minutos de rigor, viene el señor y te pregunta "Quieres que te suba alto-alto?" y si el niño dice si le coge por las piernas y le lanza hasta arriba del todo y cuando baja le vuelve a coger... y así... y los niños muertos de la risa o del susto, según niño. La verdad es que mola, si hubiera versión adultos igual me animaba a probar :-)
ResponderEliminarEl tren de la bruja mola, pero por aquí al norte últimamente se ha visto sustituido por el Dragón, que es parecido pero más a lo bruto. También hay un señor, aunque ni se molesta en disfrazarse de bruja, que te pega con la escoba pero a cambio te da un globo. Evidentemente, la niña no se puede subir sola porque si no en la primera curva se me mata.
Lo de los patos moooooolaaaaaaaaaaa muchooooooo. A mi me encanta. Es que es tan fácil y yo tan vaga... así que pescas un pato y a ver cuantos puntos tiene en la base! Siiiiiii, 10 puntos + 15 puntos + 25 puntos!! Guaaauuuuuuuu y te da para una cutretaza de Dora la Exploradora que si la metes en la microondas se recalienta y no la puedes ni sacar. A saber si ha pasado los controles de seguridad pertinentes... fijo que tiene toda clase de componentes químicos y al meter la taza en el micro se mezclan todos con el cola cao. Puaaaaaagggg!!!!
Pero es igual, las barracas molan mucho!!!
Ayyyy Ainara... las barracas.. cuánto tiempo sin oir esa palabra.. Que nostalgia!.. Ahora están de fiestas en Bilbao y me encantaría estar allí.. Un beso
EliminarMola y mucho!!
EliminarDemasiado zuzto para mi. Yo es que soy muy cagona y no me monto en las atracciones, ya sea porque me da yuyu o porque terminaria potando la papilla de anteayer y no es el plan, sobre todo si ya te has bebido algun que otro cartojal antes jijijiji
ResponderEliminarYo siempre he sido cagona... Del gusano loco y el látigo no me sacan! qué fatiga...
EliminarPues como mi sobri no tiene aún los dos años, nos estamos librando de las cutreatracciones de la feria. Aquí, en Jaén, no es hasta Octubre, ya veremos lo que pasará cuando llegue, aunque ya me veo bajandolo al ferial para montarlo en el tren de la bruja, y como salga a la madre, estaremos sufriendo escobazos hasta la Navidad, jajajaja
ResponderEliminarJajjajaja, seguro!
EliminarFlor, como me he reido con las camas elasticas! Yo tambien soy una madre acongojada cuando veo a Piruleta o Patatona descoyuntandose y dando brincos como posesos. Un besote!
ResponderEliminarMe encanta el nombre de Patatona! jajajja, yo uso mucho esa expresión cuando alguien no sabe hacer algo, generalmente yo misma, jajjaja
EliminarFlor, ¿y el pez? porque a mí el Futuro no me dejó echarle a los patos en la feria para no tener que acarrear con el pez... mala madre, que no le has dicho a la pelirroja que en los patos también hay peces.
ResponderEliminarBesotessss
Aquí no hay peces en los patos!!!! No habrá en todas partes supongo. Que horror que te toque un pez!! :-S
EliminarAquí tampoco hay peces!!! Aunque casi mejor... jajjaa
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