lunes, 8 de junio de 2015

La importancia del bolso de mano



Desde que soy madre y voy por la vida con el pelo crespo, me he vuelto una envidiosa. Fíjate que no hay cosa que menos me guste en esta vida que los envidiosos y las espinacas, pero dado que el endocrino me obliga a tomar espinacas, me he venido arriba y ahora todo son almuerzos ingratos y envidias insanas, que puestos a romper principios, mejor romperlos en bloque en plan catarsis chunga.

A mí siempre me han gustados los culos prietos y las piernas sin un gramo de celulitis, pero no en plan viejo sátiro de playa sino en plan entregaría el alma de mis bisnietos a cambio de tu cuerpo de modelo, pero era una cosa asumida y tampoco es plan de torturar a mi madre por esta genética de saldo que me ha dejado en herencia, así que una se disfrazaba con sus vestiditos monos de verano, sus biquinis estratégicos, sus borsalinos y panamás y sus gafas de espejo de fíjate lo guay que soy y al final acababa creyéndome que mis muslos eran como los de la guiri piernas de acero de la hamaca de al lado.

Pero claro, ahora que soy madre no tengo tiempo ni ganas ni fuerzas ni na de na para el postureo, que a fin de cuentas era lo que me salvaba. Y ahora mientras la nomadre generalmente perfecta que me toca al lado se unta en aceite de coco con su manicura recién estrenada y posturea, yo persigo pelirrojos enyesándolos en factor 50, transporto manguitos, toallas de Spiderman, balones y cubitos llenos de arena. Y así no hay postureo posible, porque por mucho glamour que tenga o quiera aparentar tener una, lo pierde al agacharse sudando como un pollo para cambiarle el bañador a la niña sin que se llene de arena las trompas de falopio, inflando manguitos a destajo o tumbándose (jaja) en una fabulosa toalla pareo empapada en arena mojada.

O voy de paseo y veo a las nomadres de pelo planchado y bolso de mano contoneándose como yo misma quisiera contonearme si pudiera llevar un bolso de mano en algún otro sitio que no fuera entre los dientes o en la entrepierna y se sientan a mi lado en una terraza y piden un gin tonic y se creen guays porque pueden hablar dos horas y media de un mensaje de whatssap y todas sus posibles interpretaciones y sobre pactos de gobierno y pasarelas de moda, mientras yo, que tengo el pelo como el enano del Señor de los Anillos y la cara desencajada de agotamiento extremo tengo que pelar aceitunas y partir gominolas y poner la voz de Peppa Pig y hasta hacer el ronquido ése terrible para tener al aspirante entretenido y que no le tire el vaso a los transeúntes o arranque la sombrilla de dos mil toneladas de cuajo. No hay derecho.

Y entonces me vuelvo muy loca por aquello de la falta de sueño y de carbohidratos y fantaseo con plantarme frente a ellas, darle su bolso de mano ideal de la muerte a Cigoto para que lo revolee o le vacíe medio botellín de agua dentro o se lo coma y les escupa dos gominolas a los ojos y dejarles claro que no es que ellas sean más guays ni más presumidas que yo, lo que ocurre es que el tiempo que dedican a sus cuerpos serranos lo tengo yo que emplear en mantener a dos pelirrojos con vida, que yo era tan o más guay que ellas y sus cejas perfectas, que mis bolsos de mano eran todavía más bonitos y que me gustaría verlas con dos vástagos a las espaldas a ver si podrían mantener esa melena y esas uñas perfectas y sobre todo ese postureo cuando la primogénita les gritara desde el baño de la terraza que ha terminado de hacer caca o el pelirrojo les vomitara el almuerzo en el regazo. Hombre ya.

Luego, me doy cuenta de que las pobres criaturas no me han hecho nada, de hecho hasta han sonreído amablemente cuando el hermanísimo intentó arrancar las extensiones... y al final hasta me acabo compadeciendo de pensar lo que aún les queda por delante cuando esas dos horas que ahora dedican a descifrar el mensaje de un follamigo lo tengan que emplear en calmar cólicos, ir a tutorías o hacer copiados a destajo.

Luego, cual perturbada pienso que cuando eso les llegue yo ya tendré niños adolescentes y podré renacer cual ave fénix y volver a usar bolso de mano y hablar dos horas de cualquier majaronada mientras ellas parten aceitunas y gominolas. Entonces me vengo arriba, me pinto los labios de fucsia como las modernas y me recoloco mis gafas de sol y les sonrío en plan 'soy vuestro fantasma del futuro' y me quedo en paz.

Pues eso, que voy a ir al psicólogo.


23 comentarios:

  1. Jajajaja siempre me sacas una sonrisa! Soy soltera y sin hijos aún! Tienes razón, para la época en que los tenga, tus nenes serán adolescentes! La que me espera :S

    Saludos desde Sudamérica :) Besos

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    1. Espero tener bolso de mano para entonces! jajjajaj...
      Besooooos!!!

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  2. Mientras nosotras envidiamos el glamour y la paz que disfrutan las sinhijos, quizá ellas envidian nuestra vida familiar, no sé, digo yo, porque por monas que vayan suelen estar solas en la toalla. Quizá preferirían tener encima unos cuantos niños llenandolas de arena y besitos babosos. ;)

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    1. Si quieren, yo les dejo a los pelirrojos un par de fines de semana y se les quita la morriña, jajaja

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  3. Tranquila, que a mi me pasa igual. Cuando veo a una embarazada primeriza (léase madre-en-breve) preocupada porque la cuna no ha llegado todavía a la tienda y quejándose de "lo mal que duermo últimamente, que me tengo que levantar a hacer pis tres veces por la noche" se me pone cara de "jeee..... no sabes la que se te viene encima", pero claro, yo me callo, que eso de ser portadora de malas noticias no va conmigo, no señor! Ya se dará cuenta ella solita de donde se ha metido sin que yo tenga que avisarle de nada... y luego miro a mis dos fieras, la una con 5 años, pesadaaaaaaa, pesadísima, que no calla ni bajo el agua, que no me deja leer ni un párrafo del periódico de seguido y que consigue ponerme la tensión arterial por las nubes y que mi paciencia se agote en cero coma con sus cientos de preguntas absurdas diarias y su "mamá mira, mirá mamá, ahora voy a saltar hasta diez!! Pero miraaaaa!! mirame! uno, dos, tres... upsss... a ver empiezo otra vez, mamaáaaa, mirameeeeeeeeeeee!!" y así hasta el infinito y luego está la pequeña, ni dos años todavía, al borde del suicidio contínuo y con comienzos de rabietas y con el NO en la boca a todas horas y pienso que para cuando ella de a luz y se le confunda la noche con el día y no tenga tiempo ni para ducharse y el niño le ande con cólicos, quizás yo empiece a ver la luz... Porque la de 5 años será un poco más mayor, algo menos preguntona quizás y la pequeña como mínimo no querrá abrirse la cabeza a cada minuto... espero... Y oye, no sé, casi estoy deseando que ella de a luz para que sepa lo que es "dormir mal" y "estar preocupada". Que hay que ver lo que te cambian los niños... Empiezas a preocuparte y a ocuparte por lo realmente importante, no porque ser madre te haga madurar y todo eso, sencillamente porque no tienes tiempo de preocuparte de chorradas accesorias y si la cuna no ha llegado a la tienda metes al niño a dormir en la maxicosi, vamos, que con tal de que duerma como si quieres dormir encima de la vitro!
    Total, que quien no se consuela es porque no quiere.

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  4. Jajajaja. Es inevitable sonreír ante la perspectiva de la venganza... Un besote!!!

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  5. Apunta, que te doy el numero de teléfono de la consulta... je je....

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  6. Jajaja que bueno como mola lo del fantasma de vuestro futuro!!! XD

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  7. Jajajajaja...lo que me he reído con este pedazo post, me parto..jajajaja, que grande eres Flor, si es que podías haberlo fragmentado que esto da para un libro, ahí te dejo ideas para el segundo. Pues yo decidí un día plantarme las gafas de sol, aunque ya he perdido la cuenta de las veces que fueron a arreglar, es lo que pasa cuando el pequeño tiene un master en -rompiendopatillas, también me autoregalé un bolso de mano el verano pasado y ya tengo otro, aunque tengo que darte la razón: siempre acaba en la entrepierna jajajajja...pero no veas como de prieto acaba también el culo después de caminar un rato. Pues eso, que ahora cuando me acuerdo y tengo ganas me paso al bando de las nomadres para el postureo..jajjajaja, aunque reconozco que es agotadorrrrrr. Un saludo de lunes y a por la semana!! La de los churumbeles. PD- Ayy Naiara como te entiendo con el - mira, mira, mira más, no estás mirando, mira ahora, no dejes de mirar... , por que no miras???!!! nivel tortura máximo.

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    1. 'Ez que no me eztás ezcuchando y es mi turnoooo, pero ezcúchameeeee...' muero de infarto cerebral! Ayyyy

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  8. No es que yo quiera fastidiarte la tarde pero como que, cuando los tengas adolescentes, la cosa irá a ¡peor! No partirás aceitunas pero tendrás cada pelotera increíble porque a la jodía de la hormona le da por revolucionar la mente y el cuerpo de nuestros hijos y de paso, también la correcta evolución de nuestras familias. Tendrás el bolso de mano pero levantado sobre la cabeza del adolescente esperando a darle con todo el bolso ¡sobre la susodicha! ;D Besos y ánimo.

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    1. Muero de ansiedaaaad. Noooooooo! Yo quiero tranquilidad! Ayyyyyy

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  9. jajajaja, me parto. Te veo con las manos entrelazadas pensando en lo que les espera y con la mirada perdida, jajaja yo también lo hago pedimos cita en el psicologo?? igual nos hacen descuento

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    1. Sí, por favor!! Aunque yo creo que ya estoy más para el psiquiatra!! jajajja

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  10. Jajajajaja

    Que dura es esta vida, y que divertida tambien ¿no?

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  11. Me ha encantado lo del gruñido de Peppa Pig, mi hija me lo pide en los momentos más dispares! Yo sigo tu blog a pies juntillas desde el principio, tanto que para mí, de verdad que hija no hay más que una, ya va tiene 6 años y estoy felizzzzzzz pues puedo empezar a respirar -un poquito-. Me da mucha risa nerviosa cuando alguien pretende que le de un hermanito, ja, ja! Menos mal que la última interesada en este extremo es ella misma! Yo ya tengo 40 tacos y no estoy para muchos trote, eso sí, tu pelirrojo es para comérselo, como la hermanísisma, pero es too much for me!
    Saludos arenosos y pringosos desde la Costa Topical!

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  12. Ayyy como me divierto con tus posts! si es que me siento más libre cuando recuerdo todo eso y ahora mismo estoy poniendo esa linda y perversa cara de "fantasma del futuro" porque lamento decírtelo pero mi nene cumplió ayer "12 añitos" y el bebé de la familia tiene 8, y libre, lo que se dice libre no soy; tal vez tenga que ver con que mis hijos tengan espíritu futbolero y entrenen cuatro veces por semana, o que haya que llevar al peque con el terapeuta de flores de Bach (que bien pensado, debería aprovechar la consulta, para mí, jajajaja), o tal vez con los montones de tareas y lo "dificilísimo" que me resultó el chiquito para sentarse a hacerla y además que el mayor, invadido por el espíritu de la adolescencia haga insufrible la convivencia entre los dos y que tenga que hacer de réferi cada 25 minutos (exactos). No se, lo que si es cierto es que yo soy aún más perversa que tú, porque "antes muerta que sencilla" jamás me han visto sin maquillar, en pants o sin tacones y entonces parece que la maternidad es la cosa más sencilla de sobrellevar..... ¡pobres!

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  13. Ayyy como me divierto con tus posts! si es que me siento más libre cuando recuerdo todo eso y ahora mismo estoy poniendo esa linda y perversa cara de "fantasma del futuro" porque lamento decírtelo pero mi nene cumplió ayer "12 añitos" y el bebé de la familia tiene 8, y libre, lo que se dice libre no soy; tal vez tenga que ver con que mis hijos tengan espíritu futbolero y entrenen cuatro veces por semana, o que haya que llevar al peque con el terapeuta de flores de Bach (que bien pensado, debería aprovechar la consulta, para mí, jajajaja), o tal vez con los montones de tareas y lo "dificilísimo" que me resultó el chiquito para sentarse a hacerla y además que el mayor, invadido por el espíritu de la adolescencia haga insufrible la convivencia entre los dos y que tenga que hacer de réferi cada 25 minutos (exactos). No se, lo que si es cierto es que yo soy aún más perversa que tú, porque "antes muerta que sencilla" jamás me han visto sin maquillar, en pants o sin tacones y entonces parece que la maternidad es la cosa más sencilla de sobrellevar..... ¡pobres!

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